Loro Parque ha recibido la Navidad con el nacimiento de 14 pingüinos. La llegada de estas aves marinas, ocho papúas y seis saltarrocas, representa un gran éxito para la conservación de los animales que enfrentan dificultades en sus hábitats naturales. Los nuevos integrantes de la familia de Planet Penguin están a la vista de los visitantes desde el pasado día 24. Los saltarrocas en la Baby Penguin y los papúas con el resto de la familia de pingüinos de la Antártida.

El nacimiento de los saltarrocas ha representado un gran reto, al ser una especie en estado vulnerable, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). Los expertos del Pingüinario cuidan cada detalle durante la incubación y el crecimiento de las crías.

Asimismo, los ocho nuevos integrantes de la familia de papúas se encuentran con sus padres y el resto de la familia de pingüinos de la Antártida.

La llegada de nuevas crías es siempre un indicador de bienestar animal. Es el caso emblemático de la famosa y querida hembra de pingüino rey Geisha, acogida en el Parque en agosto de 2003, que ya tiene hijos, nietos y bisnietos.

Loro Parque recrea el hábitat natural de estas especies con las 12 toneladas de nieve que caen en el recinto a diario y respeta los ciclos de luz de la Antártida. Además, durante la temporada de fiestas, los visitantes podrán observar el gran belén del Pingüinario, el único lugar de Canarias en el que nieva todo el año.