Los venezolanos residentes en Canarias dijeron ayer "no" a la enmienda constitucional que permitiría al presidente de su país, Hugo Chávez, volver a ser candidato a un tercer mandato consecutivo en 2012. El 93,1% de ese electorado votó en contra de la posible reelección, mientras que sólo el 6,9% se pronunció a favor, de acuerdo con el recuento público que se llevó a cabo en las siete mesas electorales instaladas en el Auditorio de Tenerife. El dato de participación fue del 40,7%.

La jornada estuvo caracterizada por la ausencia de incidentes y la tranquilidad "a todos los niveles", según señalaron a EL DÍA fuentes del Consulado General de Venezuela en Canarias. Explicaron que la votación de los 3.087 venezolanos inscritos en el Consejo Nacional Electoral fue "fluida", sin aglomeraciones, lo que atribuyeron a que "se ha aprendido" de anteriores jornadas "y se han ido puliendo los procedimientos".

El Consulado subrayó la rapidez en la organización y la agilidad de los votantes a la hora de depositar el voto. Salvo durante las dos primeras horas (entre las 08:00 y las 10:00), cuando se registró un mayor número de personas en espera para ejercer su derecho, el resto de la jornada transcurrió "en una evolución continuada".

Cabe recordar que el Archipiélago es la segunda región del mundo, tras Miami, y la primera de Europa, en número de electores residentes fuera de Venezuela. En el caso de España le siguen Madrid, con 2.201 electores; Barcelona, con 1.790; Vigo, con 1.284 electores, y Bilbao, donde hay 523 personas inscritas para ejercer su derecho al voto.

Los altercados registrados en Madrid, que obligaron a suspender durante algo más de dos horas las votaciones, marcaron a escala nacional la jornada electoral sobre la reelección ilimitada de cargos públicos en Venezuela.

La votación en el Consulado madrileño permaneció suspendida entre las 15:00 y las 17:30 horas, según miembros de la oposición, que denunciaron que les habían impedido vigilar el proceso pese a estar debidamente acreditados.

"Hubo un altercado y entramos por la fuerza", dijo Virginia Linares Rodríguez, uno de los testigos designados por los partidos del "Bloque del No" para salvaguardar la limpieza del proceso.

Otro interventor, Gabriel Ávalos, indicó que, durante "el lío que se montó", lograron "meter a alguien" en el edificio. "Entró la Policía, pero alegamos que no pueden entrar en sede consular y tuvieron que salir", añadió Ávalos, quien explicó que la mediación policial permitió llegar a un acuerdo.

Cuatro dotaciones de policías antidisturbios se personaron en el Consulado, sin que se produjeran detenciones, según las mismas fuentes. Los testigos de la oposición acordaron con la cónsul de Venezuela en Madrid, Yadira Russian, que podrían seguir el proceso en el Consulado, siempre que el recuento comenzase hoy por la mañana.

El resultado, hoy

Estaba previsto que los testigos del "No" pudieran custodiar durante la noche los votos, algo que, aseguraron, les habían prohibido al principio.

El embajador de Venezuela en España, Alfredo Toro Hardy, aseguró que fue "la actitud beligerante" de "algunas personas" que estaban fuera del Consulado la que "obligó" a suspender las votaciones durante "unas dos horas".

"Hasta tanto no logró volverse a la calma, no se reinició el proceso", añadió el embajador, que destacó que cuando se restableció "el orden", la votación "siguió desarrollándose con normalidad".

En cuanto a las denuncias de los testigos del "No" de que se les había impedido vigilar el proceso electoral en Madrid, indicó que estos últimos se habían presentado dos horas después del inicio de la votación y en mayor número que los testigos del "Sí".

Sobre que el recuento comience hoy, Toro Hardy dijo que se trata de una decisión del Consejo Nacional Electoral para evitar que los resultados del exterior influyan en el desarrollo del proceso en Venezuela, dada la diferencia horaria.

Los incidentes retrasaron tres horas el término de la votación en el Consulado de Madrid -donde había instaladas cinco mesas-, que cerró sus puertas a las 21:00 horas, según informaron fuentes de la oposición a Chávez.

El embajador venezolano aseguró que, al margen de Madrid, la jornada transcurrió "con la más absoluta normalidad" en el resto de ciudades españolas en las que se produjo la votación.