El jefe antidrogas de Venezuela, Néstor Reverol, rechazó ayer un informe internacional que señala a su país como principal punto de partida de la cocaína que llega a Europa. "Venezuela no es un país productor de cocaína", argumentó Reverol en declaraciones a los periodistas, y enfatizó que en este país no existen "cultivos ilícitos" de estupefacientes.

Informes como el de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE) "buscan descalificar la lucha antidroga" que se lleva a cabo en Venezuela", dijo el jefe de la Oficina Nacional Antidrogas (ONA). El documento de la JIFE, divulgado el 24 de febrero, agrega que Venezuela es "el punto de partida de la mayor parte de la cocaína que entra, por contrabando, en Europa Occidental".

La JIFE es un órgano independiente del sistema de la ONU que vigila el cumplimiento de los convenios internacionales sobre drogas.

Reverol resaltó ayer la efectividad de la política antinarcóticos venezolana y criticó que el informe de la JIFE "no destaca que EEUU continúa siendo el mercado de drogas ilícitas más grande del mundo y uno de los destinos principales de las remesas de drogas ilícitas".