El PP denunció ayer la "pasividad" del Gobierno ante la "situación de indefensión" y los "abusos" que sufren los ciudadanos españoles residentes en Venezuela al término del encuentro que mantuvieron representantes de la colonia española en este país con el senador popular Dionisio García Carnero, portavoz de su partido en la Comisión de Asuntos Iberoamericanos en la Cámara Alta.

El encuentro, según informó el PP en el Senado en un comunicado, permitió comprobar que los españoles residentes en Venezuela "tienen que sumar a las tropelías y falta de libertades del régimen de (Hugo) Chávez, la indiferencia, cuando no el incumplimiento de promesas, del Gobierno español".

En este sentido, los representantes de la comunidad española denunciaron "sin matices, la situación de indefensión y drama" que padecen, así como la "pasividad" del Gobierno español "ante los abusos y desmanes que siguen sufriendo los ciudadanos españoles en aquel país, que aumentan sin parar y, lo que es peor, sin que nadie haga nada para impedirlo", agrega el comunicado.

En particular, se mostraron especialmente críticos con el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Miguel Ángel Moratinos, a quien quieren hacer llegar la misiva relatando su situación que entregaron ayer a García Carnero.

El colectivo denunció que pese a que Moratinos les prometió en su encuentro con ellos en Caracas que el Ministerio resolvería todos sus problemas antes de dos meses, "han pasado nueve meses y no se ha resuelto ninguno de los casos".

A lo largo del encuentro de ayer relataron al senador del PP "los desmanes, robos, agresiones e invasiones de tierra y propiedad que han sufrido, ante la pasividad, complacencia y a veces colaboración del Gobierno bolivariano" de Chávez.

Asimismo, contaron cómo "la Administración bolivariana ha ido legalizando los desmanes y convirtiendo la situación de hecho en una situación de derecho", precisa el comunicado.

Tribunales internacionales

En este sentido, reclamaron al Gobierno que "les apoye en las denuncias ante los tribunales internacionales". El PP recuerda que esta cuestión ya la abordó en una moción en el Senado, que fue aprobada y que, "paradójicamente, el Gobierno no sólo incumplió, sino que se regodeó, a través del propio ministro de Exteriores, en anunciar su incumplimiento".

Por otra parte, se refirieron "a la peligrosa espiral antidemocrática que sufre Venezuela, donde corren peligro derechos humanos y civiles básicos como la libertad de prensa, opinión y expresión o el propio pluralismo político".

Dionisio García Carnero aprovechó para trasladar a esta representación "la solidaridad del Partido Popular y se comprometió con ellos a seguir presionando al Gobierno español, a través de cuantas iniciativas parlamentarias sean precisas, para que abandone su actual política de complacencia con el chavismo y de negación de estos gravísimos hechos, por los que nunca autoridad española alguna ha mostrado el interés necesario", concluye el comunicado. "No vamos a rendirnos y no vamos a dejar a nuestros compatriotas en la estacada", prometió García Carnero.

La delegación de españoles residentes en Venezuela estaba integrada por Antonio Ruiz Zapata, que conoce personalmente y desde hace años a Chávez y su familia; Félix Alfonso Barbero Martín, representante de las Hermandades de Españoles en Venezuela, y Jerónimo Pimentel Gómez