El arzobispo de Caracas, cardenal Jorge Urosa, ratificó hoy ante la Asamblea Nacional (AN) su opinión de que el presidente venezolano, Hugo Chávez, y los diputados violan la Constitución con su plan socialista, en una sesión a puerta cerrada a la que no tuvieron acceso los medios.

Urosa, que atendió una invitación que le hicieron los miembros de la directiva del Legislativo para explicar sus acusaciones, no logró su propósito de que la interpelación fuera transmitida "en vivo" por la red de emisoras estatales de radio y televisión.

Según el canal opositor Globovisión, el cardenal leyó un documento ante los miembros de la Comisión Coordinadora de la AN en el que dejó claro que sí ha emitido opiniones pero que no ha sido su "ánimo ni intención" hacer acusaciones ni denuncias.

También dijo, según el canal, que las opiniones que ha emitido sobre la vida política y social del país están amparadas en los valores de la democracia, los derechos humanos y pluralismo, consagrados en la Constitución, y que su predicación es religiosa "y de moral tanto individual como social" y no partidista.

"El cardenal ha mantenido valientemente su posición, en términos muy respetuosos, muy serios y muy responsables (...), y ha señalado que hay leyes que se han aprobado en la Asamblea que son violatorias de la Constitución", dijo a los periodistas el diputado del partido opositor Podemos Ismael García.

La presidenta de la AN, Cilia Flores, intervino al inicio de la sesión, luego le tocó el turno a Urosa y finalmente hablarán varios diputados, según García.

La polémica entre la jerarquía eclesial, el Gobierno y la AN, de mayoría gubernamental, surgió a principios de julio cuando el cardenal dijo que Chávez violaba la Constitución al querer imponer una "dictadura comunista" en el país y que en ello lo secundaban los diputados.

El gobernante le contestó que era un "troglodita" y un "indigno", y desde entonces prácticamente a diario se refiere a él, en atención a un compromiso que hizo públicamente de criticarlo "toda la vida".

Antes de entrar en la reunión, el diputado Ulises Daal, presidente de la Comisión de Participación Ciudadana, dijo a los periodistas que le iba a preguntar a Urosa si estaba al tanto de que debido a su "estatura y jerarquía" sus afirmaciones podrían ser interpretadas como "una acción orientada a desestabilizar" al país.

"No hizo un llamado a la reflexión" sino que "de plano calificó de inconstitucional, de ilegal (la ruta socialista) y que se está de camino de una tiranía", por lo que "es evidente una intención orientada a generar una angustia, una zozobra que podría derivar en situaciones que condujesen a la desestabilización", añadió.

A través de su cuenta de twitter, el diputado de Unidad Democrática Juan Jose Molina informó de que Urosa "exigió" que fuera transmitida la interpelación por los canales habituales, pero Flores "le negó ese derecho" aduciendo "que sería transmitida después".

"Miedo, temor... Con seguridad que nada va a impedir que el pueblo sepa qué discutimos ahí adentro porque estamos comprometidos con la verdad y la verdad se puede esconder por algunos momentos, pero definitivamente siempre va a resplandecer", declaró a los periodistas el diputado de Podemos Ricardo Gutiérrez.

Por su parte, el arzobispo de Coro, Roberto Lückert, pidió a la Comisión Coordinadora de la Asamblea Nacional que escuche "con seriedad" las declaraciones del cardenal Urosa, que cumple "con su deber" de poner "las cosas en blanco y negro", afirmó.

"Él (Urosa) no inventó nada, ni está insultando a nadie, sino que está diciendo una verdad que nos la están gritando y restregándonos en la cara desde hace más de 11 años, que es que este gobierno va hacia el castrocomunismo. Porque el presidente de la República nos quiere anclar en el mar de la felicidad cubana", manifestó Lückert en declaraciones a la edición digital del periódico El Universal.

El prelado criticó la decisión de no difundir en directo la interpelación y lo consideró "una estrategia" para evitar que la población escuche los argumentos de Urosa.

El cardenal atendió la invitación de hoy con "la esperanza de que haya un ambiente en que se pueda realizar un diálogo sereno y provechoso" y después de que la presidenta de la AN le garantizara "toda la seguridad y el debido respeto a su dignidad y condición humana", según un comunicado emitido por el Arzobispado de Caracas.

Urosa debía acudir a la AN el martes pasado pero un día antes dijo que declinaba la invitación al considerar que no estaban dadas "las condiciones de serenidad necesarias para un diálogo provechoso".

Detrás del "juego" del cardenal "se encuentra el golpe de Estado", afirmó Chávez tras advertir de que puede procesarlo judicialmente.