El grupo parlamentario de la oposición pidió ayer al presidente Chávez una amnistía para los "presos políticos", el fin de la compra de armas, subida de sueldos, reducción de impuestos y cambio de funcionarios judiciales y electorales, entre otras demandas.

La Asamblea Nacional dedicó ayer la mayor parte de su sesión ordinaria a debatir el informe anual de gestión presentado el sábado pasado por Chávez, en el que, con un inesperado tono conciliador, tendió puentes al diálogo con la oposición.

Los diputados Omar Barboza y Miguel Rodríguez, entre otros, en representación de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), la alianza que cuenta con 65 de los 67 diputados opositores, detallaron las reivindicaciones tras saludar que el gobernante les pidiera debatir y no actuar como enemigos.

"Pues bien, como dijo el presidente, debemos aprender a ser contrincantes y no enemigos, y presentar propuestas y aquí están", sostuvo Barboza.

Sumó a las demandas opositoras el establecimiento de un régimen de seguridad social "universal, para todos, incluidos los desempleados" y que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos constate "in situ" denuncias de violación a la libertad expresión.

Presos políticos

Barboza propuso al oficialismo discutir y aprobar una llamada "Ley de Amnistía para Presos y Perseguidos Políticos", que deje en libertad a opositores que cumplen prisión por varias causas, entre ellas homicidios.

Esa ley beneficiaría también a los dos diputados opositores electos detenidos y acusados de corrupción y homicidio, indicó Barboza.

La oposición pidió al Gobierno "cancelar todas las compras previstas de armas de guerra, para invertir esos recursos en la solución de los problemas de la gente".

El Gobierno de Chávez ha comprado en los últimos años aviones y helicópteros de guerra, guardacostas y fusiles a Rusia, por valor de más de 3.000 millones de dólares, y patrulleros costeros y de altura a España. Anunció su intención de adquirir sistemas antimisiles y radares en Irán o Bielorrusia.

El diputado Rodríguez, periodista y antiguo presentador de televisión, pidió que se permita a las emisoras privadas regresar a la Asamblea para dar cuenta de los debates, que ahora son difundidos en exclusiva por el canal de televisión del Legislativo.