El sindicalista venezolano Rubén González, condenado el martes a más de siete años de prisión, quedó ayer en libertad condicional tras permanecer 17 meses preso y después de dos días de protestas tanto de sectores obreros oficialistas como opositores.
"Es una gran victoria de la clase trabajadora. Con nuestra lucha estamos liberando a nuestro compañero Rubén González", dijo a la prensa el dirigente sindical José Boda, después de que el Tribunal Supremo de Justicia informara de la medida sustitutiva a la Alcaldía de Ca-roní, en cuyo calabozo estaba recluido González.
La jueza Magda Hidalgo, del estado Bolívar, condenó el pasado martes a González por "instigación a delinquir, violación de zona de seguridad, agavilla-miento (reunión para delinquir) y coacción a la libertad de trabajo", según medios locales.
González, secretario general del Sindicato de Trabajadores de Ferrominera del Orinoco, llevaba 17 meses preso acusado de esos delitos por cerrar una carretera para reclamar el cumplimiento del contrato colectivo que ampara a los trabajadores de esa empresa estatal, según la sentencia divulgada por medios locales.