El Gobierno de Panamá anunció ayer que concede asilo territorial al opositor venezolano Nixon Antonio Moreno Merchan debido a "la preocupación por su integridad personal" y que rechaza la petición de extradición de la colombiana María Pilar Hurtado, antigua jefa del servicio de inteligencia.

El Ministerio de Exteriores panameño explicó en un comunicado que la decisión sobre Moreno resalta la tradición de país de asilo de la que goza Panamá. En la misma nota oficial, Panamá también notifica el rechazo a la solicitud colombiana de extradición de la exjefa de inteligencia de ese país María del Pilar Hurtado, acusada en su país de una trama de escuchas y seguimientos ilegales durante el gobierno de Álvaro Uribe.

Según la Cancillería, el venezolano Moreno solicitó el 21 de octubre de 2011 al Gobierno de Panamá que se le concediera la condición de asilado territorial "debido a la preocupación por su integridad personal en caso de retornar a su país de origen".

Panamá recuerda que posee una larga tradición de asilo que se remonta al período previo a la era republicana, como son los casos de Francisco Morazán (hondureño) de 1840-41, o Eloy Alfaro (ecuatoriano) 1869-1883.

Líder estudiantil

Moreno, de 37 años, es un politólogo y dirigente estudiantil opositor al Gobierno de Chávez quien estaba refugiado en Perú hasta que asumió el poder en julio el presidente Ollanta Humala. Contra Moreno existe una alerta roja en la página de la Interpol que le busca por "fugitivo, vandalismo y daños y delitos sexuales".

La búsqueda contra Moreno, considerado un "perseguido político" por la oposición venezolana, es consecuencia de un proceso abierto contra él en 2006 por un tribunal de Mérida (Venezuela) por "homicidio intencional simple en grado de frustración" sobre un funcionario policial y de "actos lascivos violentos" contra la policía Sofía Aguilar en grado de "cómplice necesario". Sus abogados niegan estas acusaciones.

En 2007 Moreno se refugió en la embajada del Vaticano, que le dio asilo político, pero se escapó el 9 de marzo de 2009 después de que Caracas se negara a expedirle un salvoconducto, y el 13 de agosto de ese año apareció en la capital de Perú, cuyo Gobierno le otorgó refugio ese año.

Por su parte, la colombiana Hurtado, asilada en Panamá desde noviembre de 2010, está acusada en Colombia de concierto para delinquir agravado, violación ilícita de comunicaciones, abuso de función pública, peculado por apropiación y falsedad ideológica en documento público.