Venezuela se prepara para el segundo y último ensayo electoral a falta de cinco semanas para las elecciones del 7 de octubre en las que el presidente, Hugo Chávez, aspira a su tercera reelección y se enfrentará al candidato unitario opositor, Henrique Capriles.

Este domingo, se abrirán 1.553 centros de votación, en los que operarán 4.832 mesas, a lo largo del país entre las 8:00 hora local (12:30 GMT) y las 15:00 (19:30 GMT) para que los venezolanos se familiaricen con el nuevo sistema de votación automatizado y las autoridades electorales verifiquen el funcionamiento del sistema.

El simulacro estaba previsto para el domingo pasado, pero fue postergado por las fuertes lluvias y en solidaridad con la explosión que la madrugada del día 25 ocurrió en la refinería Amuay dejando un balance de 42 fallecidos, ocho desaparecidos y más de un centenar de heridos.

Después del ensayo del 5 de agosto, que se desarrolló con normalidad, la prueba de hoy permitirá a los electores conocer de cerca el nuevo sistema de máquinas captahuellas.

La vicepresidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Sandra Oblitas, dijo ayer que uno de los objetivos de la prueba es "evaluar el tiempo de duración del ejercicio del voto", que actualmente es de un minuto y cinco segundos.

Alrededor de 19 millones de venezolanos están convocados a participar en los comicios presidenciales de octubre en los que concurren siete candidatos encabezados por Chávez, de 58 años y en el poder desde 1999, y Capriles, exgobernador y abogado de 40 años.

Por su parte, el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, insistió ayer en que ganará las elecciones del próximo 7 de octubre frente al candidato unitario de la oposición, Henrique Capriles, aunque admitió que probablemente no lo hará "cómodamente" e hizo un llamamiento para llegar al 70% de los votos.

"Nosotros, a estas alturas, estamos ganando las elecciones yo no digo que cómodamente, no, no, pero estamos ganando", dijo el presidente en un acto con trabajadores públicos.

"Ahí están las empresas serias que lo dicen, 15% ó 20%, pero yo aspiro a más para darle una lección al candidato jalabola y para darle al mundo una poderosa señal de la fuerza que tiene la revolución bolivariana", remarcó.

Como ya ha dicho en anteriores ocasiones, el mandatario subrayó que su objetivo es llegar "a los diez millones de votos".

"¡Vamos rumbo al 70% de la votación!", exclamó.

En un discurso de poco más de dos horas, insistió en que hay que conquistar "con mayor intensidad" a los sectores "medios, indecisos, confundidos" o a los que denominó como "atemorizados".