Digital 104 amplía su área de influencia. La productora tinerfeña acaba de iniciar una experiencia que tiene como reto promocionar los trabajos audiovisuales que están bajo su custodia en festivales con sede en España e intentar dar un salto de calidad a las citas internacionales más destacadas.

"El cine que se hace en Canarias sigue teniendo un consumo endogámico", señala Jairo López, uno de los cuatro miembros fundadores de Digital 104, en relación a la difusión que tiene el sector del cortometraje en el Archipiélago: "Nadie se va a hacer rico dirigiendo un corto", dice el director tinerfeño. "La mayor recompensa que puede tener un realizador es que su obra se vea; no solo conformarse con ver a sus familiares y amigos en una proyección", reitera un realizador que se puso al frente de un documental cien por cien canario que se estrenará en el verano de 2013.

"El jardín barroco", proyecto que en la actualidad está en su fase de posproducción, recoge el desarrollo creativo que mostró Roberto García de Mesa durante dos semanas en la Sala Conca de La Laguna. "En esta performance se combina la pintura, la escritura, la lectura de un poema y la música", avanza el autor de los cortometrajes "Veneno" y "Como siempre".

Digital 104 no solo distribuirá los productos canarios que se incluyen en su catálogo -ocho cortos, un par de largometrajes y un documental-, sino que ha añadido a su oferta productos que se hacen en otros puntos de la geografía española: en su lista están los cortos "Carpe Diem", "Descubriendo el sur" y "Copenhague". Con el inicio de 2013 los tres ámbitos en los que se va a volcar esta empresa son la producción audiovisual, la elaboración de documentales y la distribución de sus títulos.

"El documental le está ganando terreno al cortometraje porque su producción no es tan costosa y los tiempos de elaboración son distintos", avanza Domingo J. González, director de "Ridícula" y componente de Digital 104. Otro de los cambios más significativos que se están dando en la industria del cortometraje tiene que ver con las plataformas de difusión.

"Muchos festivales están optando por crear unos canales alternativos a las salas a través de internet. Esta semana, por citar un ejemplo muy cercano, se han estrenado dos cortos canarios en la red. Esa es una realidad que no podemos obviar, a pesar de que todavía hay muchas cosas que corregir", asegura Domingo J. González.

Jairo López no le ha declarado la "guerra" a las nuevas tecnologías, pero tiene claro que "en Digital 104 siempre nos hemos opuesto a que los usuarios accedieran a un corto que está en la red de forma gratuita... Ir a una representación de teatro cuesta dinero, ¿no? La gente tiene que empezar a valorar que no todo lo que hay en la red es de libre acceso", comenta antes de hablar de la ausencia de financiación autonómica.

"El apoyo al sector audiovisual -en el que se incluyen proyectos cinematográficos, cortos y documentales- desde el Ejecutivo canario es cero; eso es así desde el año 2012", denuncia López. "Lo único que se está apoyando en estos momentos es la distribución y la elaboración de un catálogo (Canarias en corto) de trabajos hechos en las Islas", precisa uno de los creadores de la productora tinerfeña Digital 104.

Otro de los inconvenientes que impiden la evolución del corto en el Archipiélago está concentrado en la falta de espacios para proyectar los mismos. "Un director se puede considerar afortunado si logra mostrar su obra en el TEA y en el Espacio Cultural Aguere", adelanta López en un discurso que ratifica su compañero. "El público de las Islas no consume este tipo de proyectos audiovisuales", precisa un director que almacenó un éxito superior al que tuvo en casa con la difusión de "Ridícula" en Estados Unidos. "En ocasiones es por falta de información, no porque no tenga interés en conocer el trabajo que se está haciendo aquí", añade.

"Cualquier municipio canario tiene un espacio en el que se puede exhibir un audiovisual. No hace falta tener unos medios técnicos muy costosos para proyectar un documental... Solo se necesita un equipo, un DVD y un director que explique a los asistentes algunas cuestiones sobre el trabajo que van a presenciar", enumera López.

Sobre los niveles de calidad, el punto de vista de Domingo J. González gira en torno al concepto de que "muchas veces una idea se genera por la recompensa de un premio; no para buscar emociones". Ese interés por ganar, en opinión de López, "no es algo exclusivo de la industria del corto, sino en general de todas las artes".

Jairo López

Componente de Digital 104

Domingo J. González

Componente de Digital 104