Tres años después de la muerte de José Saramago, su viuda, Pilar del Río, sabe que la obra del gran escritor portugués "está en buenas manos", porque de cuidarla se encargan los lectores y las editoriales. "Cada día hay más interés por su obra y más demanda para hacer teatro, películas y ópera".

"Saramago nunca fue un ''bestseller'' comercial pero sí un ''bestseller'' literario, porque los lectores, cuando lo leen, se sienten respetados", decía hoy Pilar del Río en una entrevista con Efe, la víspera del aniversario del fallecimiento del novelista, al que mañana recordarán en la biblioteca de la casa que ambos compartieron durante años en Lanzarote, que será abierta al público.

A las once de la mañana, hora de la muerte de Saramago, "hombre de una sola palabra, de una sola pieza", como lo ha definido en más de una ocasión Del Río, el violonchelista Damián Martínez Marco interpretará la suite 6 de Bach, composición que menciona el escritor en su novela "Las intermitencias de la muerte".

En estos tres años, Pilar del Río se ha preocupado sobre todo de mantener viva la faceta de "de hombre moral, de intelectual con voz desasosegante" que Saramago desarrolló a lo largo de su vida, y para eso cuenta con la fundación que lleva el nombre del escritor y cuya sede está en Lisboa.

"La fundación nació para desasosegar, y no somos neutros. Intervenimos en todos los debates, propiciando situaciones de cultura porque la cultura desasosiega", algo muy necesario en estos tiempos de "bloqueo", como ella prefiere llamar a la crisis que afecta a buena parte del mundo.

"Me niego a llamarlo crisis, porque nos están bloqueando económicamente, democráticamente, judicialmente y culturalmente", asegura la presidenta de la Fundación José Saramago, que se financia con los derechos de autor del escritor.

El espíritu de Saramago también está muy vivo en la casa-museo de Lanzarote. "Cuando la gente entra en la biblioteca, entiende por qué Saramago era como era": "Un hombre valiente, libre; un pensador que fue capaz de anticipar muchas de las cosas que están pasando en el mundo", asegura Pilar del Río.

Y las anticipó no solo en sus numerosas intervenciones públicas, sino en obras como "Ensayo sobre la ceguera", "Ensayo sobre la lucidez" o "La caverna", tres libros que "definen este tiempo y que, de alguna manera, proponen soluciones", señala Del Río, periodista y traductora de la obra de Saramago.

"Lo que viene a decir Saramago es que las soluciones no las trae ningún dios, no vienen de arriba. Es lo que nosotros decidamos hacer levantándonos del suelo, de acuerdo con ese otro libro que José escribió al principio, ''Levantados del suelo''", comenta Del Río, convencida de que la actuación de los ciudadanos "es fundamental" para salir de la crisis.

La presidenta de la Fundación José Saramago no puede "anticipar lo que pasará en el futuro" con la obra del escritor, pero sabe "lo que pasa en el presente, y es que "se sigue leyendo y cada día hay más interés por ella".

Como ejemplo de ese interés, menciona la película que el canadiense Denis Villeneuve dirige sobre "El hombre duplicado" o la que prepara el portugués Miguel Gonçalves Mendes sobre "El Evangelio según Jesucristo".

Y alude también al espectáculo teatral basado en la novela "El viaje del elefante", que a lo largo de varios meses recorrerá Portugal y viajará también a Madrid y Viena, para recrear el fascinante viaje de Salomón.

El tercer aniversario de la muerte del escritor coincide con la publicación del libro "José y Pilar", que recoge las conversaciones que Miguel Gonçalves Mendes mantuvo con el novelista y su mujer durante los cuatro años que tardó en rodar la película del mismo nombre, estrenada en 2011.

Editado en España por Alfaguara, el libro muestra el lado más personal del escritor, sus constantes viajes por el mundo y su relación con Pilar, que fue, según la define ella, "espléndida: libre, clara, asumida, vivida de forma no convencional".

Este libro "enseña a un Saramago en zapatillas, y eso es hermoso", asegura la presidenta de la Fundación.

"José y Pilar" contiene horas de conversaciones y es una excelente ocasión para conocer lo que pensaba el escritor sobre la política, el trabajo, el amor, la literatura y la muerte. Y para descubrir a la mujer que compartió 24 años de vida con él.