Aunque en el terreno digital sólo lleva enfrascada un año al frente del Huffington Post, Montserrat Domínguez ha tocado todos los palos del periodismo y esa experiencia es la que le permite afirmar que si los ciudadanos no valoran a los periodistas es debido a sus connivencias con el poder.

Domínguez (Madrid, 1963) sostiene que las nuevas tecnologías están provocando una revolución en el sector que hace que la situación actual de la profesión resulte "tan incierta como apasionante".

¿Cómo describe la situación actual del periodismo?

Tan incierta como apasionante. El gran cambio tecnológico está provocando una revolución en nuestro sector y los viejos modelos de negocio ya no sirven, así que entramos en territorios nuevos e inexplorados. Internet, las redes sociales y el mundo global interconectado nos permiten un acceso directo a lo que está ocurriendo en casi cualquier rincón del planeta: a una abundancia de información inédita, y muy valiosa si la utilizamos bien. Los periodistas tenemos que aprender a utilizar estas nuevas herramientas y fuentes, sin renunciar a los valores clásicos de nuestro oficio.

¿Hacia dónde van los medios de comunicación?

Es difícil vislumbrar el camino. Está claro que cada vez son más multimedia, más participativos e interactúan de una forma que antes no era posible con sus lectores/oyentes/espectadores.

¿Cree que los medios escritos no terminan de pegar el salto a lo digital? ¿Peligran los medios en papel?

Muchos medios que sólo se editaban en papel son ahora auténticos gigantes en digital porque han sabido incorporar las enormes posibilidades que ofrece internet. Pero no todos han hecho el cambio, y algunos no conseguirán recuperar su peso en un mundo cada vez más digital. A mí me gusta el papel, creo que la lectura en soporte impreso tiene una calidad distinta, pero es obvio que cada vez consumimos más información a través de las pantallas. La movilidad se presenta ahora como un reto formidable para los que nos dedicamos a los contenidos.

¿A qué achaca la escasa valoración que los españoles hacen de los periodistas?

Hay una desafección general contra el sistema y los medios somos parte de él. Además, muchos ciudadanos creen que nuestras connivencias con el poder político o económico son excesivas y nos castigan por ello. No les falta algo de razón, pero eso me lleva a una tercera reflexión: dentro del periodismo escucho a muchos colegas atizándose los unos a los otros, y esa imagen desprestigia.

¿Qué cualidades hacen falta para ser un buen comunicador?

Pasión por contar lo que sucede (es contagiosa), rigor con los datos, libertad y pluralidad en las opiniones, criterio para diferenciar entre lo importante y lo urgente y sensibilidad para conectar con tu público.

¿Estaría a favor de que los medios digitales fueran de pago como ocurre en muchas cabeceras en Estados Unidos? ¿Se lo plantean en su diario?

Entiendo que es un debate quizás necesario. Obviamente los soportes tradicionales están sufriendo una transformación que hace que no sean sostenibles las redacciones tal y como las conocemos hasta ahora. Por ello, tienen que explorar más fórmulas, pero aquí y fuera. Lo que ocurre es que nosotros al ser un medio cien por cien digital y ser generalista, tenemos muy claro que nuestra información va en abierto. Yo no vislumbro ahora ninguna posibilidad de que un medio como el Huffington cobre por contenidos, aunque no es descartable más adelante, por contenidos concretos que se pueden colocar encerrados. Pero claro, ahora mismo, con la explosión de medios que hay en la red, es difícil cobrar por algo que encuentras fácilmente.