El servicio de talleres lúdicos y comedores escolares de verano de la Consejería de Educación y Universidades del Gobierno de Canarias volverá a abrir este verano para acoger a algo más de 2.000 alumnos. La cifra representa la mitad de los chicos que se matricularon en este recurso en 2014, el año que más inscritos se registraron.

En concreto, este año, en julio se han apuntado 2.322, cantidad que en agosto cae a 2.221. Las áreas metropolitanas de las dos islas capitalinas son las que tienen más demanda.

El director general de Ordenación, Innovación y Promoción Educativa, Jonathan Martín Fumero, explicó ayer a este periódico que a pesar de que el descenso de estudiantes puede significar que hay una mejoría económica, la cifra sigue siendo alta y el servicio se seguirá prestando mientras sea necesario.

Desde que empezó la crisis, la Consejería de Educación ha tenido que asumir distintos servicios sociales que no son propios del área, entre ellos abrir los comedores durante los meses de verano para atender a las familias que peor lo han estado pasando durante estos años.

El coste de abrir los colegios en verano y dar de comer a los chicos, que asumen entre la Consejería de Educación y el Servicio Canario de Empleo -Funcatra paga el coste de los monitores-, asciende a 1,1 millones de euros.

El año que más alumnos acudieron a los comedores fue en 2014, cuando se matricularon más de 4.000 chicos. El curso pasado la inscripción media de los dos meses fue de 2.600, pero más de la mitad de los inscritos -el 52%- no acudió luego al servicio.

Además, durante el curso los colegios atienden a 70.000 alumnos en los comedores. De estos, más de la mitad recibe subvención y 14.000 tienen "cuota cero" porque los ingresos familiares son inferiores a 6.600 euros. Para atender a estos comensales, Educación destina 15 millones de euros anuales de su presupuesto.

Otra de las medidas "sociales" puestas en marcha por el Ejecutivo es la gratuidad de los libros de texto, que se empezó a aplicar hace unos cursos y terminará de implementarse esta legislatura.

El objetivo final del departamento que dirige Soledad Monzón es dar cobertura a los 80.000 alumnos con libros gratis.

En este caso, los beneficiarios son niños que viven en familias con ingresos inferiores a los 15.980 euros.

las claves

Más alumnos durante el curso. Más de 35.000 alumnos tienen subvencionado el comedor durante el curso, de los que 14.000 son de cuota cero, es decir, tienen ingresos por debajo de 6.400 euros.

El coste, compartido. El coste de este recurso, que asciende a 1,1 millones de euros, lo asumen Educación y Empleo.

14.000 "cuota cero". Durante el curso, unos 14.000 alumnos no pagan el comedor porque sus familias ingresan menos de 6.400 euros al año.