El líder del PSOE, Pedro Sánchez, buscará los apoyos necesarios para que prospere la moción de censura presentada hoy contra el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, quien le ha acusado de pretender relevarle "a cualquier precio y con quien sea" con una iniciativa que debilita a España.

Después de la sentencia del caso Gürtel conocida ayer, el PSOE ha decidido dar el paso de presentar la segunda moción de censura de la legislatura contra Rajoy y la cuarta de toda la etapa democrática.

Lo hace, según ha explicado Sánchez, para "constituir un Gobierno del PSOE" cuyo objetivo será convocar elecciones "cuanto antes", aunque sin fijarse un plazo concreto.

"La moción es constructiva, para garantizar la gobernabilidad, constituir y formar un gobierno del PSOE, con fundamentos sólidos y una hoja de ruta clara", ha dicho Sánchez, quien ha garantizado que hará cumplir la Constitución.

Pero no ha desechado la posibilidad de ser investido presidente con el apoyo de los partidos independentistas, ya que ha apelado a la responsabilidad y generosidad de los 350 diputados para, "entre todos, sacar a España del lodazal de la corrupción".

El objetivo real que Rajoy cree que tiene el líder del PSOE es bien distinto, ya que en una comparecencia en el Palacio de la Moncloa y visiblemente enojado con Sánchez le ha acusado de tener como única meta ser presidente del Gobierno "a cualquier precio".

"La moción no es la consecuencia de nada, sino la excusa de todas las necesidades políticas de Sánchez, que ya en su día tuvo a España sin gobierno durante nueve meses y ahora -ha precisado- vuelve a las andadas pretendiendo constituir gobiernos con cualquiera".

En concreto, ha expuesto dos opciones del líder del PSOE: o pactar con Cs y Podemos a la vez o hacerlo con ERC, el PDeCAT, Bildu y Compromís.

A su juicio, cualquier gobierno formado con esos apoyos es "inviable", y Sánchez lo sabe aunque "le da igual". Por ello, ha advertido de que "cualquier día le veremos pactando con el señor Puigdemont".

Frente a las pretensiones de Sánchez, Rajoy ha reivindicado su legitimidad para seguir siendo presidente del Gobierno y su derecho a convocar elecciones cuando considere oportuno.

De esta forma ha rechazado también la petición de Ciudadanos de que convoque en breve los comicios generales, porque, de lo contrario, impulsará o apoyará una moción de censura.

Lo ha pedido tanto el líder de este partido, Albert Rivera, en un mensaje en su cuenta de Twitter, como su secretario general, José Manuel Villegas, en una conferencia de prensa en Valencia.

Pero Ciudadanos no tiene diputados suficientes para impulsar una iniciativa de este tipo sólo con sus diputados (son 32 y necesita 35), y Villegas ha anunciado que votarán contra la moción de los socialistas, porque no estarán junto a Podemos y los independentistas.

La exigencia de Ciudadanos de que Rajoy convoque elecciones porque cree que la legislatura está "liquidada" no puede llevarse a efecto por el momento, porque es imposible hacerlo cuando se está tramitando una moción de censura.

Pero el presidente del Gobierno no piensa en adelantar los comicios aunque fracase la moción, ya que hoy ha insistido en su intención de agotar la legislatura, máxime tras haber conseguido que el Congreso aprobase esta semana el proyecto de ley de presupuestos para 2018.

Además, Rajoy cree que Sánchez no tiene autoridad moral para presentar la moción y se ha preguntado si dimitirá cuando se resuelva la sentencia de los ERE en Andalucía.

La moción, de la que el líder del PSOE ha informado al Rey, será tramitada el lunes por la Mesa del Congreso y no se prevé que se debata antes de dos semanas.

El líder de Podemos, Pablo Iglesias, ha asegurado que no pondrá condiciones a Sánchez para apoyarla y "desalojar a los corruptos", aunque le ha advertido de que para gobernar tendrá que dialogar "con mucha gente".

Mientras que el portavoz del PDeCAT en el Congreso, Carles Campuzano, está abierto a hablar con el PSOE, el portavoz adjunto de JxCat, Eduard Pujol, ha marcado distancias y se ha preguntado "qué ganan los catalanes sustituyendo a un presidente corrupto" y "pésimo" por un "cómplice" del 155.

El portavoz de ERC en el Congreso, Joan Tardà, sí ha confirmado el apoyo de su grupo a la moción del PSOE al considerar "urgente echar de forma democrática" al PP.

Por parte del PNV, el lehendakari, Íñigo Urkullu, ha instado a ir paso a paso ya que lo prioritario es que Rajoy "dé explicaciones" sobre la "gravísima condena" del caso Gürtel.

El único diputado de Nueva Canarias, Pedro Quevedo, clave para que el Gobierno sacara adelante el proyecto de ley de presupuestos, ya ha anunciado que votará a favor de la moción, y Coalición Canaria ha comunicado que no la respaldará si es secundada por los independentistas.