El sistema ILS -siglas de "Instrument Landing System"- continúa utilizándose en el aeropuerto de Tenerife Norte-Los Rodeos en su categoría estándar, a pesar de que está instalado su nivel avanzado: el denominado "CAT II-III". Con este dispositivo -un apoyo para la aproximación aérea, lo que aumenta las posibilidades de aterrizaje en caso de niebla- no se han producido novedades en el transcurso de los últimos años porque, reiteradamente, las particulares condiciones orográficas y meteorológicas del aeródromo han impedido que los vuelos de prueba resulten satisfactorios, según explicaron a EL DÍA fuentes oficiales de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA).

Para entenderlo, el mecanismo -que cuenta con tres grandes categorías- se compone de un equipo en tierra que emite señales. Estas son procesadas por los aviones y se las muestran al piloto. Se trata, en concreto, de dos haces electrónicos: uno guía al avión en dirección a la pista y otro (la "senda de planeo") es una ayuda vertical por la que el aparato va siguiendo un pasillo de descenso hacia la cabecera. A medida que aumenta la categoría, el aterrizaje puede producirse con una visibilidad menor.

Cada vez que se produce un episodio intenso de niebla, como sucedió el pasado domingo, hay miradas que se dirigen hacia el ILS, cuyo camino en Los Rodeos ha sido complicado. Según indicaron desde AENA, el comienzo se sitúa en 2008, cuando se realizaron varios expedientes para la implantación de la categoría III. "Por parte de Aeropuertos, se mejoró el sistema de luces de aproximación, se desplazó el umbral con respecto a su posición anterior y se creó una superficie artificial para mejorar la señal del radioaltímetro", detallaron. "Por su parte, Navegación Aérea realizo los trámites oportunos para la publicación de CAT II-III", añadieron sobre un proceso en el que, adicionalmente, se llevó a cabo una "sesión de identificación de riesgos" en la que no se llegó a detectar "ninguna amenaza relacionada con la señal del ILS asociada a CAT III".

Los contratiempos llegaron con la puesta en marcha del sistema, ya en 2009. "En abril de ese mismo año se degradó la operación ILS a CAT I, puesto que los pilotos reportaron numerosos problemas durante las maniobras de aproximación", apuntaron acerca de unas contingencias que los profesionales atribuyeron a fluctuaciones en la señal. Ante eso, Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea inició un proceso de estudio y un vuelo de verificación específico con un avión laboratorio. Al final se terminó concluyendo que el principal motivo era la existencia de fenómenos de "turbulencia y cizalladura".

"Las aviónicas detectaron que la trayectoria real de la aeronave, al tratar de compensar dichos fenómenos de turbulencia y cizalladura, queda fuera de tolerancias, provocando la desconexión del modo automático de aterrizaje, dando lugar a maniobras de frustradas", manifestaron, en términos técnicos, sobre la anomalía específica que se producía entonces.

Como quiera que las radioayudas y señales cumplían los requisitos técnicos y operativos, la empresa lo siguió intentando. No en vano, entre agosto y octubre de 2014 se realizaron hasta diez vuelos de prueba por parte de varias compañías. Solamente uno logró completar la aproximación de forma automática y todos refirieron turbulencias en la última parte de la aproximación.

Una jornada marcada por la reubicación de quienes no pudieron volar

Los aeropuertos canarios vivieron ayer una jornada marcada por la reubicación de los pasajeros que no pudieron volar el domingo. AENA indicó que el balance final de la niebla de anteayer en Los Rodeos se saldó con 22 desvíos y 50 cancelaciones (18 llegadas y 32 salidas, aunque de estas últimas "muchas" se realizaron desde el Sur), sobre un total de 201 operaciones previstas./ Á. hdez.

Un 0,17% de desvíos durante el pasado año

Un episodio de niebla como el del domingo genera incomodidades a los pasajeros -y trastoca el ritmo normal de los aeropuertos- de una forma que lo lleva a destacar sobre los días en que todo marcha dentro de la normalidad. Mirando al pasado año, durante 2017 se produjeron en Tenerife Norte-Los Rodeos 103 desvíos por causas meteorológicas. En términos porcentuales, esa cifra supone el 0,17% de las operaciones que estaban programadas.

Alonso: retraso con la segunda fase del Sur

Tras los problemas de anteayer en Tenerife Norte-Los Rodeos, el presidente del Cabildo, Carlos Alonso, se refirió este lunes a que lo que sucede en la instalación se debe a esos problemas de calibración detectados en los últimos años, y también se expresó sobre las actuaciones previstas en Tenerife Sur. "Con el previsible cambio en AENA se han vuelto a retrasar las mejoras que estaban previstas. Tenemos pendiente una reunión con el presidente de AENA, que iba a venir a Canarias ahora por estas fechas, y, como consecuencia de ese posible cambio ha anulado su viaje", manifestó el político nacionalista acerca de las modificaciones en la cúpula de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA).

Alonso añadió que se ha contratado a un equipo técnico para asesorar en el cambio que tiene que realizarse en el aeródromo sureño, a fin de que este quede lo mejor posible. "Estamos pidiendo una mejora en dos fases", recordó. "La primera tiene que ver con la ampliación de las instalaciones actuales, que para eso ya se está redactando el proyecto, y se tendría que licitar la obra antes de que se termine el año", expuso el dirigente tinerfeño. Por su parte, para el segundo tramo iban a estimar el tráfico aéreo futuro y, sobre esa base, tomar la decisión de construir una nueva terminal. "Porque la mejora que se va a hacer para nosotros es insuficiente", planteó, antes de apostillar que ahora habrá que esperar a que sea designado el nuevo director.