Virginia Guantanamera actuó el pasado fin de semana en territorio marroquí. La intérprete de raíces cubanas que reside en Tenerife ofreció un concierto en la Sala Brahim Radí (Agadir) que nació en virtud a una colaboración que existe entre artistas marroquíes y canarios. "Cada viaje es distinto, pero la música sigue siendo el punto de convergencia en el que todo fluye", aseguró una solista que hace 10 días estuvo en cuba presentando una aventura musical que tiene como título "Un timple por el mundo".

Virgina acudió en 2016 por primera vez a una cita cultural que este año celebrá su XV edición para mostrar un "Homenaje a Celia Cruz", en el que contó con la colaboración de Raiko León al piano y como director musical de una banda de ocho componentes. "La música aúna y hace vibrar los corazones; hace que afloren muchos sentimientos", asegura una creadora que afirma: "Si algo he aprendido de este oficio es que la música no entiende de idiomas ni de costumbres. En ese sentido, ningún público es mejor o peor. Reacciona a lo que tú seas capaz de transmitir", asegura de la audiencia que se encontró en Cuba y Marruecos.