El general de Brigada Juan Miguel Arribas Revuelto tomó posesión ayer como jefe de la Zona de Canarias de la Guardia Civil y autoridad de coordinación para la inmigración en el Archipiélago.

Arribas pidió a sus subordinados "potenciar el contacto con los ciudadanos en el desarrollo del servicio", para que estos "perciban nuestra presencia y tengan esa sensación de seguridad". Señaló que, con esa actitud, "se establecerá un canal de comunicación y de colaboración ciudadana que nos permitirá recibir información valiosa para el desempeño eficaz de nuestro trabajo".

El nuevo general jefe del Instituto Armado en las islas defiende el contacto y la colaboración con las autoridades, especialmente con los alcaldes y también con diferentes tipos de asociaciones y la sociedad civil.

Para Juan Miguel Arribas Revuelto, "la investigación puntual y eficaz de los delitos debe contribuir a mejorar los índices de esclarecimiento y, por tanto, los niveles de eficacia policial, en unos tiempos en los que a los delitos tradicionales se unen nuevas formas de delincuencia.

El máximo responsable de la Guardia Civil manifestó que "la violencia de género, tan importante desde el punto de vista cuantitativo como cualitativo, debe ser objeto preferente de atención, tanto por los puntos de atención especializada de nuestras unidades de Policía Judicial como por las de Seguridad Ciudanana.

El acto estuvo presidido por el teniente general jefe del Mando de Operaciones Territoriales de la Dirección General de la Guardia Civil, Laurentino Ceña Coro, y la delegada del Gobierno en Canarias, Elena Mánez.

Arribas Revuelto estuvo destinado en Canarias durante cuatro años en la unidad de Helicópteros y coincidió durante 12 años con el citado Ceña Coro.