Esta semana se cumplían tres años de la investidura de Fernando Clavijo como presidente del Gobierno de Canarias. La legislatura arrancó retomando el diálogo y normalizando las relaciones con el Gobierno de España que daba sus primeros frutos con la suspensión de la compensación al Estado por la supresión del Impuesto General de Tráfico de Empresas (IGTE). Con ello, Canarias ganaba 160 millones de euros anuales con los que se creaba el Fondo de Desarrollo de Canarias (FDCAN), destinado a promover la realización de acciones que contribuyan a la cohesión económica y social territorial, al desarrollo económico y la creación de empleo en las Islas.

Este beneficio se plasmaba en la planificación de inversiones de mil seiscientos millones de euros, en diez años, para atender a las necesidades de todas las islas desde la solidaridad, concibiendo a Canarias como una tierra única de ocho realidades distintas cada una con sus necesidades específicas.

Precisamente, el defender nuestro concepto de una Canarias de una sola velocidad, en la que ninguna isla se quede atrás, supuso la ruptura del pacto cuando los consejeros socialistas abandonaban, por tercera vez, la mesa del Consejo de Gobierno oponiéndose al FDCAN defendido por Fernando Clavijo.

Tras la negativa del PP a entrar en el Gobierno se abría un nuevo escenario en el Parlamento de Canarias en el que el Grupo Nacionalista ha hecho un gran esfuerzo de dialogo y de búsqueda de acuerdos. La habilidad para el consenso ha permitido aprobar numerosas iniciativas, algunas de gran calado, como la Ley del Suelo y de los Espacios Naturales Protegidos de Canarias, la Ley de Presupuestos de la Comunidad Autónoma, la renovación de todos los órganos de relevancia estatutaria y el reciente acuerdo para designar al administrador único de la Radio Televisión Canaria, que ha logrado la continuidad de la emisión además del mantenimiento de los puestos de trabajo de los cientos de familias que directa o indirectamente dependen de ese servicio público.

Mientras tanto, CC ha defendido en Madrid, de la mano de Ana Oramas, más inversiones para Canarias a través de los presupuestos generales del Estado, y el compromiso con la Agenda Canaria. Los asuntos incluidos en esta agenda son de enorme relevancia para nuestro desarrollo económico y social, como la desvinculación del REF de la financiación autonómica, permitiendo que nuestro fuero económico compense realmente nuestras singularidades; y que dentro del sistema de financiación, Canarias sea tratada en igualdad de condiciones tras años de descapitalización.

La reforma del Estatuto y de los aspectos económicos del REF son también pilares que pueden consolidar el avance del Archipiélago y hay un compromiso claro de sacarlos adelante esta Legislatura. Una vez acabado el trabajo de ambas ponencias esperamos que puedan ser aprobados antes de final de año, independientemente de los cambios políticos que se han sucedido en las últimas semanas.

Con la moción de censura a Rajoy y la llegada al Gobierno de Pedro Sánchez el panorama político daba un vuelco inesperado. Desde Canarias dimos un voto de confianza al nuevo Gobierno, sin embargo las primeras decisiones han hecho que se enciendan algunas alarmas. Aparcar la revisión del sistema de financiación autónoma o la negativa a aplicar de manera inmediata el descuento del 75% a los vuelos con la Península, unido al amago de colarnos el concepto de tarifa bonificable en lugar del descuento por el precio real del billete, en contra de la propia ley de presupuestos y de los reiterados informes del Parlamento de Canarias.

Ayer nos despertábamos, además, con la noticia de que el Gobierno del Estado pudiera no cumplir con los compromisos adquiridos con Canarias en materia de obras hidráulicas. Recordemos que los presupuestos son importantes, pero sin los convenios que los materialicen (Obras Hidráulicas, Infraestructura Educativa, Carreteras?) todos esos fondos quedarán en papel mojado.

A pesar de todas las dificultades pasadas y las que se vislumbran en el horizonte, en Canarias seguimos con la hoja de ruta marcada en 2015: trabajando con el Gobierno desde el Grupo Nacionalista Canario en la consecución de un Archipiélago mejor y por una mayor calidad de vida, especialmente para las personas más vulnerables. El balance nos demuestra que estamos en la senda de la recuperación.

Esta semana conocíamos algunos datos. 700 millones de euros destinados a políticas sociales, una reducción de un 16,5% en las listas de espera, 134.000 intervenciones quirúrgicas más, 24 millones para libros de textos; además de las ventajas fiscales impulsadas por el Gobierno y unas cifras de empleo que invitan al optimismo: en lo que va de legislatura el paro ha disminuido en 43.347 personas.

Constancia, compromiso, diálogo y consenso. Esta ha sido nuestra forma de trabajar y seguimos avanzando.

*Diputada del Grupo Nacionalista en el Parlamento de Canarias