La Federación Provincial de Entidades de la Construcción de Santa Cruz de Tenerife ha afirmado que la Consejería de Obras Públicas del Gobierno canario tiene "una evidente prioridad" para las obras de carreteras en Gran Canaria y ha pedido igualdad de trato para el resto de las islas.

Fepeco indica que mientras en Tenerife son todo retrasos injustificados "con problemas absurdos y pocas ganas de resolverlos, que lleva a tener una isla colapsada, inmovilizada y desvertebrada", en Gran Canaria, el concurso para la segunda fase de la carretera de La Aldea se publicará antes de que termine el mes de julio.

Esta obra, indica una nota de Fepeco, ya tiene el proyecto y la declaración de impacto ambiental, tiene una inversión de cerca de 228 millones de euros y está todo preparado para que los trabajos se adjudiquen antes de terminar el año.

Señala Fepeco que en cambio, en Tenerife los tiempos son más lentos y en algunos casos ni discurren.

Añade que "el premio de consolación" es que este mes existirá un proyecto plasmado en papel del cierre del Anillo Insular " por lo que tendremos que seguir esperando bastantes meses o años el comienzo de la obra".

Fepeco dice que el consejero también ha anunciado "otra vez más, esperemos que sea la definitiva", la contratación de la obra Las Chafiras-Oroteanda, que lleva un retraso "muy considerable".

"No hay más, porque sencillamente no se ha hecho nada, no hay proyectos para más obras, precisamente en la isla que más demanda tiene de obras de carreteras, por su situación de caos viario y colapso circulatorio" señala la nota de la federación de la construcción.

Agrega que el consejero de Obras Públicas "en su afán desmedido por beneficiar a su isla", también ha pedido una nueva pista para el aeropuerto de Gando, porque de esa manera se "abre la posibilidad real de ser un centro de conexión en medio del Atlántico".

Oscar Izquierdo, presidente de Fepeco, expresa en la nota su malestar por la deriva que está tomando la Consejería, ya que, en su opinión, es muy preocupante el desequilibrio en la gestión y sobre todo en la eficacia ejecutiva en las obras de carreteras.

Izquierdo indica que en Tenerife hay muchos ambientes y personas "un silencio claudicante, que ha hecho posible que nuestra isla se quede parada económica y socialmente".