Han vuelto. Los destinos turísticos del Mediterráneo -Turquía y Egipto, en especial- han recuperado parte del vigor perdido durante los años en que la zona estuvo inmersa en la inestabilidad política y bajo la amenaza terrorista. Este "resurgir" de la competencia ha afectado sobre todo a Canarias -aunque también a Baleares-, pese a que la disminución de las cifras del Archipiélago aún no es demasiado significativa.

La Alianza para la Excelencia Turística (Exceltur) presentó ayer su informe sobre los resultados del segundo trimestre de 2018, en el que el grupo constituido por algunas de las principales empresas del sector destaca que Turquía y Egipto recuperaron hasta mayo unos 4 millones de clientes. "El crecimiento de la llegada de turistas a estos países -explica Exceltur- procede principalmente de los principales países emisores de turistas a España": Alemania, Reino Unido y Francia.

La "esperable" mejora de estos destinos se ha dejado notar especialmente en Canarias y, en menor medida, Baleares durante el inicio de la temporada. Así, el 55,7% de los empresarios canarios cerró el segundo trimestre con unos resultados "levemente" por debajo de los del mismo periodo de 2017, influidos por una caída de los ingresos por habitación disponible -RevPAR, el índice con el que se mide la rentabilidad del negocio hotelero- del 0,8% entre marzo y mayo.

Este descenso se debe a la menor ocupación (3%) a pesar de la mejora en precios (2,3%), que ha caracterizado a las islas, con la excepción de Fuerteventura, donde han subido los ingresos a pesar de que ha retrocedido la demanda.

Exceltur ha revisado a la baja el crecimiento de la actividad turística en España para 2018 hasta el 2,6 %, desde el 3,3 % que auguraba en abril, cifra que se sitúa una décima por debajo del desempeño que los analistas estiman para la economía española (un 2,7 %), informa Efe.

Esta revisión se debe a la desaceleración de la actividad en el segundo trimestre por la combinación de factores atípicos como las adversas condiciones atmosféricas, la celebración del mundial de fútbol o la inestabilidad política en Cataluña, explicó ayer el vicepresidente ejecutivo de Exceltur, José Luis Zoreda.

Sin embargo, la capacidad de generación de empleo del turismo se mantiene ante la mejora de las perspectivas para el verano, cerrando el trimestre con un aumento del 3,2 % en el número de afiliados a la Seguridad Social, hasta alcanzar sus valores máximos superando los 2 millones (450.000 más que en 2009).

Para la temporada de verano, las empresas anticipan una ligera aceleración del crecimiento de sus ventas y sus resultados.