El papa Francisco recordó ayer la figura del pontífice Pablo VI, al que describió como "el gran papa de la modernidad", al cumplirse 40 años de su fallecimiento. El pontífice argentino también mencionó que Pablo VI será canonizado en el Vaticano el 14 de octubre, día en el que también será convertido en santo el arzobispo salvadoreño Óscar Arnulfo Romero.

"Hace cuarenta años, el beato papa Pablo VI estaba viviendo sus últimas horas en esta tierra. Murió, de hecho, en la tarde del 6 de agosto de 1978. Le recordamos con mucha veneración y gratitud, a la espera de su canonización, el próximo 14 de octubre", dijo Jorge Bergoglio.

El papa pronunció estas palabras desde la ventana del palacio apostólico del Vaticano, ante miles de fieles de diversas partes del mundo que se congregaron en la plaza de San Pedro para escucharle.

Pablo VI y monseñor Romero, asesinado en 1980 por un escuadrón de la muerte del Ejército salvadoreño mientras oficiaba misa, serán canonizados durante el Sínodo de Obispos dedicado a los jóvenes que se celebrará en el Vaticano entre el 3 y el 28 de octubre.

Este anuncio se realizó un día después de que el arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati, dijera que no encabezará el Te Deum en Chile, una ceremonia religiosa anual a la que asisten los principales políticos y miembros nacionales del clero, en medio de un escándalo por abusos sexuales en la iglesia que impactó al conservador país de mayoría católica, en el que el propio Ezzati está siendo investigado por encubrimiento.

Ezzati, que encabezó la ceremonia durante años y es una de las figuras religiosas más reconocidas en Chile, dijo en un comunicado que considera "prudente no encabezar nuestro tradicional Te Deum" dada "la profunda crisis que vive nuestra Iglesia", según una declaración recogida el diario La Tercera.

Fiscales chilenos investigan 38 acusaciones de abuso sexual que involucran a 73 obispos, sacerdotes y laicos y a 104 víctimas. A finales de julio, Ezzati pasó a ser sospechoso en una investigación sobre acusaciones de que él y otros sacerdotes encubrieron abusos sexuales a niños por parte de miembros de la iglesia católica y lo llamaron a testificar.

Ezzati siguió defendiendo su inocencia en el comunicado emitido el sábado: "Tengo la certeza de que nunca he encubierto ni he obstruido a la justicia y cumpliré con mis deberes ciudadanos de aportar todos los antecedentes que contribuyan a llegar a la verdad".

El anuncio fue emitido un día después de que líderes locales de la iglesia pidieron perdón por el abuso sexual a menores cometidos por sacerdotes y aceptaron abrir sus archivos y mejorar la coordinación con los fiscales.