Un grupo de socorristas que desarrolla su trabajo en la zona de Punta Brava, en el Puerto de la Cruz, asistió ayer a una joven alemana, víctima de la fuerza del mar.

Hacia las 18:35 horas observaron cómo la mujer se encontraba en dificultades y saltaron al agua para auxiliarla.

Una vez en tierra, y en una primera observación, se percataron de que sufría un desplazamiento de rodilla. Al lugar acudió una ambulancia de soporte vital básico y, después, una medicalizada que la trasladó a un centro sanitario.