Canarias y Cantabria fueron las únicas comunidades autónomas españolas que registraron más muertes por ahogamiento que por accidentes de tráfico en 2017, según destaca el estudio realizado por la Plataforma para la Prevención de Ahogamientos "Canarias, 1.500 kilómetros de costa".

Este trabajo especifica que el Archipiélago contabilizó en el pasado año 93 fallecimientos por accidentes acuáticos por solo 44 en sus carreteras, mientras que en Cantabria perdieron la vida por sumersión 24 personas frente a las trece víctimas en los siniestros de tráfico.

Asimismo, las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla contabilizaron una sola víctima por accidentes de circulación, en tanto que ascendieron a cuatro las muertes que acaecieron por ahogamiento.

Para realizar esta comparativa la plataforma asegura que ha utilizado datos oficiales de la Dirección General de Tráfico y los difundidos por la Asociación Española de Técnicos de salvamento Acuático y Socorrismo.

Según esos datos, en el curso 2017 las carreteras españolas se cobraron la vida de unas 1.200 personas, mientras que las muertes por ahogamiento fueron 542.

Con este estudio la plataforma canaria pretende dar visibilidad a un fenómeno que provoca miles de víctimas cada año en España y, asimismo, instar al Estado a activar campañas de prevención como las que viene haciendo con la seguridad vial desde hace medio siglo.

Canarias, donde la primera causa de muerte por accidente es el ahogamiento, es la única comunidad autónoma del país que lleva cuatro años lanzando campañas en medios de comunicación y en el propio sector turístico, dado que de cada diez fallecidos ocho son extranjeros.

A su juicio del autor del estudio, no es comprensible que con estos índices de siniestralidad en distintos entornos acuáticos, con el drama y el dolor que provocan los accidentes acuáticos, jamás se haya puesto en marcha en España una sola campaña pública para reducir estos accidentes.

Para la plataforma, el ahogamiento siempre será la muerte silenciosa, pues quien se ahoga no puede gritar, pero subraya la necesidad de que deje de ser la muerte silenciada, por lo que reclaman que se implemente la cultura de la seguridad acuática a la ciudadanía española.

En el análisis comparativo del estudio, Galicia casi iguala en 2017 la mortalidad en las carreteras (77) con los ahogamientos (70), mientras que en Baleares los fallecidos por accidente de tráfico fueron 48 víctimas mortales, frente a las 33 por sumersión.

El País Vasco registró 30 víctimas en sus carreteras y 22 ahogados; Asturias, 27 muertes en las vías y 19 en el medio acuático, y la Comunidad Valenciana 100 fallecidos por accidente de tráfico y 71 en sus aguas.

Andalucía lideró en 2017 este ranquin con 200 víctimas mortales en sus vías, por 76 en el agua, seguida de Cataluña (169-52) y Castilla y León (123-24).

Por su parte, Aragón registró 58 muertes por accidente de tráfico y 7 por ahogamiento; Castilla La Mancha, 112 y 7; Extremadura, 50 y 9; Madrid, 68 y 5; Murcia, 46 y 19; Navarra, 15 y 2, y La Rioja, 19 y 2, concluye el comunicado de esta plataforma para la prevención de ahogamientos.