"Lo más importante es que somos una compañía canaria que tiene una responsabilidad con Canarias". El director general de Compañía Cervecera de Canarias (CCC), Florian Weins, recuerda que la empresa acumula una experiencia de más de cuatro décadas como parte de grupos internacionales y que está "acostumbrada" a ello sin perder nunca su raíz isleña. Ahora integrada en AB InBev, CCC pretende consolidar su liderazgo en el mercado e ir más allá para profundizar en su compromiso con la sociedad del Archipiélago. "Para CCC es clave una Canarias más limpia, sostenible y sana", recalca.

Weins desembarcó en Canarias hace alrededor de un año y medio, un tiempo en el que ha aplicado algunas de los principios y valores que, asegura, inspiran la actuación del grupo multinacional cervecero. Una de sus primeras medidas fue, en este sentido, quitar todas las puertas de los despachos. En efecto, las instalaciones que CCC tiene en La Cuesta se caracterizan por sus espacios limpios y abiertos con los que la compañía pretende facilitar la comunicación. No es necesario descolgar un teléfono para hacer una consulta o pedir un dato; basta con acercarse a la mesa del compañero indicado para hacerlo.

Los principios que guían el "cambio de cultura" que ha experimentado la compañía se encuentran expuestos en una de las paredes. Constituyen un decálogo, pero Weins los resume en unos pocos: soñar -siempre "en grande", porque "cuesta la misma energía que soñar en pequeño"-, la gente como centro de las políticas de la empresa -con promociones y asignaciones de puestos basadas en la "capacidad" y el "desarrollo" y no en la antigüedad u otros factores-, la implicación -ser "dueño de la compañía, tratarla como algo tuyo"- y evitar los "atajos" -lo que se traduce en "hacer siempre las cosas de la forma correcta", cumpliendo con el código ético y con las normativas-. Los 350 trabajadores de la empresa -que genera otros 9.000 empleos de forma indirecta- "se han adaptado bien" a este cambio de cultura corporativa, apunta Weins.

Fomar parte de un grupo internacional no significa que el foco de CCC no siga puesto en sus marcas más representativas e identificables. "Muchas veces he dicho que la prioridad son Dorada y Tropical", sostiene el "general manager" de la compañía. Pero esa integración en AB InBev da la posibilidad de tener un portfolio de marcas más amplio con las que responder a las demandas que pueden plantear, por ejemplo, los turistas que visitan las Islas, un mercado de gran importancia para la organización. Esa ampliación permite también hacer frente a una competencia cada vez mayor que la empresa considera algo "sano" y que obliga a "pensar diariamente cómo mejorar".

Las políticas de responsabilidad social son una prioridad para la compañía, explica Weins. Proyectos para reducir el uso de vidrio, cartón y plástico; vasos retornables en las fiestas del Carnaval; avance hacia el 100% de energía renovable; utilización del bagazo -la cáscara del cereal- para alimentación animal o compost agrícola; limpieza de playas; colaboración con un centro de parálisis cerebral; fomento del consumo responsable... "Seguimos trabajando en esa línea", afirma el director general.

AB InBev ha invertido unos 8 millones de euros desde que CCC se integró en el grupo, tres de ellos para la producción local de la cerveza belga Stella Artois. Pero la idea de la empresa es "invertir más", adelanta Weins.