El Ejército de Estados Unidos va a desplegar a unos 1.500 soldados adicionales en Alemania para septiembre de 2020, que se sumarán a las más de 33.000 unidades que las tropas norteamericanas tienen el país, una decisión por parte de Washington que podría reavivar las tensiones con Rusia.

El presidente ruso, Vladimir Putin, sugirió el mes pasado que las fuerzas de la OTAN en el este de Europa suponían una amenaza militar para Rusia, unas alegaciones que el resto de altos mandos de la Alianza del Pacífico rechazaron vehementemente.

Desde la central europea de las tropas norteamericanas en Europa, que se encuentra en la localidad alemana de Wiesbaden, han asegurado que las nuevas tropas estarán estacionadas de manera permanente en Alemania como parte de "un despliegue de nuestro compromiso continuado con la OTAN y nuestra determinación a proteger a la comunidad europea".

La enorme cantidad de críticas que ha dirigido el presidente estadounidense, Donald Trump, a la OTAN, había disparado todas las alarmas ante la posibilidad de que Washington dejase de aportar fondos en materia de Defensa en Europa.

"La suma de estas fuerzas aumenta la preparación del Ejército de Estados Unidos en Europa y garantiza que seremos más capaces de responder de manera efectiva a cualquier tipo de crisis", han asegurado.

Richard Grenell, el embajador estadounidense en Alemania, ha declarado que la decisión forma parte del compromiso por parte de Washington de fortalecer la alianza transatlántica, por lo que el aumento de efectivos militares supone una ventaja a la hora de mejorar la seguridad en el continente.

La ministra de Defensa alemana, Ursula von der Leyen, ha aplaudido la decisión. "La decisión por parte de Estados Unidos de aumentar su presencia militar aquí en Alemania es una señal muy bienvenida de la vitalidad de la alianza transatlántica y de nuestro compromiso con una seguridad conjunta", ha establecido.