Puerto Rico cedió de 50 puntos el sábado frente a Bélgica, lo que a priori presentaba a una selección americana cómoda de batir por la subcampeona del Mundo. Nada más lejos de la realidad. Dolido, el equipo de Gerardo Batista quería borrar su mala imagen del estreno. El cóctel que se preparó con una nueva zozobra inicial de España fue explosivo. Las boricuas se llegaron a poner con 10 puntos de ventaja hacia el ecuador del primer cuarto, sorprendiendo en un Santiago Martín cariacontecido.

Desde la defensa, la selección nacional se lamió la herida para comparecer por delante al descanso. A partir de ahí se vio a un combinado rojigualdo más reconocible, que siguió apretando en defensa y se desató en ataque -a pesar de un discreto 21% en los tiros de tres-, liderado por la pívot Astou Ndour, maxima anotadora del encuentro con 22 enteros.

Así, España asalta el liderato gracias a la derrota de Bélgica ante Japón, aunque deberá ganar mañana -20:00 horas, Santiago Martín- a las centroeuropeas para evitar las eliminatorias de octavos de final y presentarse directamente entre las ocho mejores.

Se espera que lo haga con las jugadoras interiores Laura Gil y Laura Nicholls, que recibieron sendos golpes propinados por una defensa centroamericana por momentos excesivamente dura.

Como ante Japón, otra vez salió mal al encuentro España. Eso sí, lo hizo con caras nuevas: Domínguez, que regresó tras su lesión, Cruz y Gil -se mantuvieron Torrens y Ndour-. El seleccionador Lucas Mondelo paró el choque a los dos minutos de juego con 0-4 en el tanteador y peores sensaciones. No mejoró la selección, que siguió concediendo en defensa y se le atragantó la zona boricua en ataque. Estrenó la cuenta Torrens, que se estrelló desde la barrera del 6,75 una y otra vez -cero de cuatro-. La máxima visitante llegó a los 10 enteros (3-13 y 5-15), con las exteriores O''Neill -seis puntos- y Meléndez -siete- como adalides. La segunda -y última- canasta nacional del cuarto fue obra de Casas, entrando hasta la cocina, cuando faltaban más de cuatro minutos. Mantuvo España las distancias e incluso las redujo (8-15) a base de acudir al 4,60. Mientras, seguía marrando lanzamientos: hizo cero de ocho en triples y dos de 18 en tiros de dos. Un auténtico desastre.

Mondelo echó mano de Palau y Xargay en el arranque del segundo cuarto. Mientras, O''Neill siguió tirando de su equipo, aunque la defensa española limitó la producción americana y pudo empezar a correr. A los 15 minutos llegó el primer triple del partido, obra de la capitana Palau. Un robo y contragolpe de Xargay puso el encuentro en un pañuelo (21-23). Gerardo Batista detuvo el choque, aunque no la producción rojigualda. Nicholls igualó y un dos más uno de Cruz puso la primera ventaja de las locales en el duelo (26-23). Puerto Rico, que seguía sin anotar de tres -cero de cuatro- también notó una merma en la producción en la zona -tres aciertos de 16 intentos en este cuarto-. González dejó el tanteador en 26-25 al tiempo de descanso. España había capturado 30 rebotes -nueve en ataque, para apenas dos puntos de segunda oportunidad-, el doble que su adversario y había perdido 13 balones.

Y lo hizo el combinado anfitrión, apretando más los dientes en defensa y encontrando tiros cómodos en la zona para hacer la diferencia -parcial de 6-0 y tiempo muerto puertorriqueño-. Ndour se adueñó de la pintura y Xargay destapó un segundo triple español. Un lanzamiento libre de Ouviña colocó el más 10 (41-31). Las manos españolas aparecían por todas partes, de ahí que las pérdidas puertorriqueñas se multiplicaran -cinco en los primeros 20 minutos y siete en el tercer cuarto-. De hecho, alguna posesión terminó sin lanzamiento a los 24 segundos. O''Neill no pudo anotar en sus cinco intentos -el juego colectivo de las suyas se escenificó a la perfección dadas sus dos asistencias en 30 minutos- y la ventaja española se fue a los 15 (48-33), con un triple de Cruz y un contragolpe finalizado por Torrens. Meléndez, sobre la bocina, recortó dos puntos.

España estaba cada vez más cómoda en ataque, moviendo bien el balón -logró 24 asistencias en total- y encontrando tiros liberados -triple de Domínguez y canasta de Casas-. Nicholls intimidó en un lado de la cancha y Ndour se empezó a desatar en la otra. La buena mano de la senegalesa -anotó 11 puntos en el último cuarto- elevó el marcador a una renta cercana a los 20 puntos (64-45). Aunque O''Neill -17 puntos- volvió a encontrar vías de anotación, España halló un filón desde la media distancia, con Xargay y Ouviña. Domínguez y Palau confirmaron los 25 puntos de distancia.

78-53

8-15

18-10

22-10

30-18

españa-puerto rico

España: Domínguez (5), Cruz (9), Torrens (6), Gil (6) y Ndour (22) -quinteto inicial-. También jugaron Palau (4), Xargay (8), Nicholls (5), Ouviña (6), Casas (5), Arrojo (-) y Sánchez (2).

Puerto Rico: Rosado (8), O''Neill (17), Meléndez (11), Gwathmey (9) y Jones (4) -quinteto inicial-. También jugaron Maldonado (-), Gibson (-), González (2), Salaman (2), Placido (-), Pérez (-) y Quiñones (-).

Árbitros: Manuel Mazzoni (ITA), Snehal Bendke (IND) y Daniel García (VEN).

Incidencias: Pabellón Santiago Martín. Unos 4.000 espectadores.