El exalcalde de Santiago del Teide Juan Damián Gorrín Ramos se enfrenta a peticiones, por la Fiscalía, de tres años de cárcel y 14 de inhabilitación para ostentar cargo o empleo público al considerarle autor de dos supuestos delitos de homicidio imprudente y otro de prevaricación administrativa, por la tragedia de Los Guíos. Además, pide que el ayuntamiento, a través de la aseguradora, indemnice a los familiares de las víctimas en la cantidad que se determine.

El juicio tendrá lugar el día 19 de noviembre y en el mismo se determinará la responsabilidad del acusado en la muerte, el 1 de noviembre de 2009, de dos personas que quedaron sepultadas por los desprendimientos que se produjeron en el talud de la playa.

El Ministerio Público recuerda que a principios de octubre de ese año se detectó un primer derrumbe, sin víctimas ni heridos, y que después de que los bomberos y policías visitaran el lugar advirtieron del peligro "inminente" de que se repitiera. Los informes fueron presentados a través del Registro municipal y tenían como destinatario al alcalde en ese momento, quien asumía la gestión de Seguridad Ciudadana.

Poco después, el arquitecto de la Corporación local certificó que el terreno afectado presentaba poca consistencia, que la pared seguía siendo inestable y en la misma aparecían diversas grietas de gran tamaño. Por ello, recomendaba el inmediato desalojo de la playa y que se adoptaran medidas para impedir el acceso de los usuarios. A finales de ese mes se personó otro técnico municipal y uno de la Dirección General de Costas, quienes llegaron a las mismas conclusiones y advertían de que el acantilado "se puede caer en cualquier momento". Informes que hicieron llegar al exalcalde, quien estaba obligado a garantizar la seguridad de los usuarios al tener "pleno conocimiento de la gravedad y urgencia de la situación".

Pese a ello, el acusado no dictó resolución alguna ordenando el cierre de la playa, ni estableció un dispositivo de vigilancia ni colocó carteles que avisaran del peligro existente. A partir de aquí, el 1 de noviembre dos mujeres accedieron al lugar, en el que se produjo un gran desprendimiento de arena y piedras que cayó sobre ellas sepultándolas, por lo que murieron a causa de asfixia mecánica y politraumatismos.