José Luis Oltra no esperó para poner el "contrapunto" al alivio que sintió anoche el tinerfeñismo por el triunfo logrado ante el Rayo Majadahonda, el tercero del equipo blanquiazul en la presente campaña. Sin dejar de darle "valor" al resultado, porque en Segunda División es "casi imposible" ganar sin sufrir, el entrenador reconoció que "hay cosas" que no le acaban de gustar.

El valenciano afirmó que "hay que darle valor a la victoria, porque en esta categoría no es sencillo ganar, y hacerlo sin sufrimiento es casi imposible". Asimismo, compartió su deseo de que el 2-1 "sirva para liberar algo de tensión, de ansiedad y de ese sufrimiento que tiene el equipo y que, en algunas ocasiones, pesa excesivamente".

De momento, es una victoria que aleja en un punto al Tenerife de los puestos de descenso. "Hemos salido, pero los miramos de reojo", avisó.

Oltra no se dejó llevar por la alegría de la victoria en el momento de admitir que el margen de mejora del Tenerife es grande. "Todavía veo cosas que no me acaban de gustar. No voy a engañar a nadie. No voy a decir que está todo bien. Posiblemente hemos mejorado algo y nos acercamos a la versión que damos en casa, pero tenemos que seguir insistiendo y corrigiendo cosas, porque nos queda para ser el equipo que podemos ser".

En cuanto al desarrollo del encuentro, explicó que "el primer gol llegó antes que los méritos, pero la jugada fue muy buena". A partir del 1-0 vio pasar "una fase" en la que el Tenerife "pudo sentenciar" el partido, "aunque el rival también disparó al larguero y tuvo algún acercamiento. Pero, en líneas generales, el equipo estuvo bien y con tres centrales sufrió menos". Precisamente, contó que tuvo una "pelea interna" para dar el paso de jugar con tres centrales, algo que hizo al poner en el campo a Carlos Ruiz cuando el Rayo Majadahonda había acortado distancias en el marcador. "Son cambios que no hago para la grada ni para el entorno, pero creo que nos ayudó, y no lo digo para ponerme una medalla. Si nos hubieran empatado, dirían que metí al equipo atrás, pero necesitábamos evitar situaciones de uno contra uno", comentó Oltra antes de revelar que su ayudante (Emilio Isierte) le sugirió en el descanso esa misma sustitución, aunque él optó por esperar. "El equipo estaba teniendo momentos buenos y otros en los que le podían las dudas. No estábamos siendo tan ganadores en las situaciones de uno contra uno, así que tuve una pelea interna y pensé que no era el momento de cambiar. Luego, a raíz del gol del Rayo Mahadahonda, decidí que no era cuestión de perder lo que teníamos".

A pesar de no ser amigo de los análisis individuales, dedicó unas palabras a José Naranjo. "Hizo un gran partido y estoy muy contento con él. Aparte del gol, provocó la jugada del penalti. Además, la gente pudo ver en él movilidad, pelea, presión... Lo que no gusta es que un jugador no transmita energía".

También se refirió a Filip Malbasic, al que felicitó tras el partido. "Está con chispa, con la flechita para arriba y con un punto a nivel de desequilibrio y de confianza, pero le está faltando el gol para redondear una buena actuación", manifestó en rueda de prensa.

"Fue un partido extraño, todo se nos fue al traste"

Antonio Iriondo calificó como "extraño" el partido de ayer en el Heliodoro por el tempranero gol de Naranjo y los dos cambios obligados que tuvo que realizar en el primer tiempo. "Sin hacer uno de nuestros mejores encuentros, tuvimos ocasiones y dominamos en muchas fases. Saco una buena lectura, con excepción del resultado".

El técnico reconoció que esperaba jugar con la ansiedad del Tenerife, "pero todo se fue al traste", añadió refiriéndose al tanto de Naranjo. "Aún así, les hicimos correr y ellos tuvieron que realizar un gran esfuerzo. Eso les mermó a la hora de hacer más cosas ofensivas".

Por último, se refirió a la situación del Tenerife. "Tiene mimbres y un gran entrenador, pero pasó de un técnico a otro, distintos a la hora de concebir el juego. Eso lleva su tiempo y a lo mejor aquí hay mucha ansiedad".