El Tenerife puso todo lo que tiene y no le dio para ganar a un Extremadura bien plantado, rocoso, en ocasiones brusco, y que contó con la inestimable colaboración de un colegiado anticasero como Óliver de la Fuente Ramos para sumar un punto en el Heliodoro. Se tragó un clarísimo penalti sobre Joao y otro algo más discutible sobre Alberto. Dos empujones en el área de los que se desentendió con el mismo criterio que pitó el resto del duelo: generoso con el visitante y riguroso con el local.
No le pesó a José Luis Oltra el conocimiento que pudiera tener Rodri de su equipo y apostó por la normalidad en el once. Raúl Cámara entró por Luis Pérez, Alberto volvió a la zaga, Milla al eje y las bandas de ataque fueron para Suso y Montañés. Tres llegadas en los primeros minutos de partido, con dos remates de Malbasic en posición forzada y un disparo de Milla que detuvo Álvaro, supusieron un anticipo de las intenciones insulares. Fue el tiempo que tardó la escuadra visitante en desperezarse. Al menos para no sufrir. A partir de ahí tiró de paciencia para cortocircuitar con su presión alta la salida rival y bajar las revoluciones del juego.
Contagiado, el Tenerife perdió intensidad en la presión y acabó recibiendo algún susto. Gallego, después de un envío de Olabe por encima de la defensa, estuvo lento para rematar y dio tiempo a que Camille despejara a córner (14''). En la ejecución del mismo, Zarfino cabeceó libre de marca y Milla salvó bajo palos. El Heliodoro reaccionó reclamando a los suyos que recuperaran el brío. Oltra se desgañitaba pidiendo a su centro del campo que circulara el balón con mayor celeridad.
Mientras, De la Fuente Ramos se entretenía dejando entrar duro a los azulgranas y amonestando, por entradas similares, a los dos mediocentros locales. Era solo un aviso de lo que estaba por venir. Poco después llegó la quinta amarilla a Naranjo en una acción innecesaria y evitable. Quedó entonces tocado el equipo de Oltra, incapaz de romper en estático la telaraña de Rodri.
Solo cuando aceleraba el paso el Tenerife había sensación de peligro. Montañés, que se aprovechó de un rechace afortunado, rondó el gol (35'') con un ajustado disparo al exterior de la red. Fue el preludio de la acción más clara de la primera parte, un contragolpe bien conducido por Undabarrena y Suso, que culminó Naranjo demasiado tarde (40''). Era un mano a mano, aunque forzado, que abortó Granero.
Las cartas estaban boca arriba. Al Extremadura le interesaba un ritmo pausado con y sin balón. En ataque entretenía hasta buscar en ruptura las diagonales de Kike Márquez o Chuli. En defensa cerraba espacios rezando para que Suso, Malbasic o Naranjo no pudieran correr.
Así, para la segunda parte Oltra buscó reactivar a los suyos asumiendo algún riesgo más. Sobre todo el de un contragolpe teniendo, como tenía, a sus dos pivotes con tarjeta amarilla. Malbasic (55'') fue el primero en buscar portería. En el córner resultante, Alberto pidió penalti por un empujón de Pardo que existió. ¿Suficiente? De la Fuente Ramos entendió que no.
Nano fue la elección del técnico tinerfeñista para dar un paso adelante. Nada más entrar, remató al palo. La acción, en claro fuera de juego, espoleó al público. El Tenerife ganó algo de continuidad en ataque porque fue más agresivo, robando más lejos de su portería y sumando a Naranjo como entrada por la izquierda. En uno de sus intentos, el onubense puso un balón al que no llegó Nano por poco (71''). De nuevo lo iba a intentar el reaparecido atacante blanquiazul con un disparo lejano (77'').
Para entonces, el Extremadura había dado un paso atrás empujado por los locales y confirmado por el cambio de Rodri: Álex Barrera por Olabe. Solo a balón parado respiraban los visitantes. Cada interrupción era aire para ellos. Malbasic, impotente, lo intentó desde lejos (82''). Entonces llegó la acción del penalti más claro no señalado en mucho tiempo. Un empujón increíble de Álex Barrera sobre Joao, sin jugadores próximos que interrumpieran la visión del colegiado... y de su asistente.
Quedaban seis minutos. La precipitación jugó una mala pasada a Carlos Ruiz y Willy dio el susto a un Dani Hernández que supo rectificar a tiempo (87''). Oltra quitó a Cámara, ya a la desesperada, y sumó a Tyronne. Una buena combinación entre Naranjo y Malbasic acabó en las botas de Nano, que remató forzado ya con el tiempo cumplido en la última intentona blanquiazul.
Tenerife: Dani Hernández; Raúl Cámara, Alberto, Carlos Ruiz, Camille; Suso, Undabarrena, Milla, Montañés; Naranjo, Malbasic. En el minuto 61, Nano entró por Montañés; en el 75, Joao Rodríguez ocupó el lugar de Suso; y en el 88, Tyronne entró por Cámara.
Extremadura: Álvaro Fernández (2); Álex Díez (1), Pardo (1), Borja Granero (1), Pomares (1); Olabe (1), Fausto Tienza (1), Zarfino (2), Kike Márquez (1); Enric Gallego (1) y Chuli (1). En el minuto 72, Álex Barrera (1) reemplazó a Olabe; en el 78, Valverde (s.c.) sustituyó a Kike Márquez; y en el 86, Willy (s.c.) entró por Chuli.
Árbitro: Óliver de la Fuente Ramos (0), del Comité Castellano-leonés, asistido por Pescador Hernández y García Aguilera. Amonestó a Undabarrena (12''), Milla (21''), Naranjo (25''), Olabe (25''), Enric Gallego (67''), Raúl Cámara (82''), Joao (84'') y Pomares (84'').
Incidencias: Partido de la decimoséptima jornada de la Liga 1 2 3, disputado en el estadio Heliodoro Rodríguez López, ante 9.317 espectadores. Paola Hernández, campeona del mundo sub''17 con la selección española, realizó el saque de honor. La acompañó Andrés Clavijo, técnico de la Federación Tinerfeña y asistente en el combinado nacional en la cita de Uruguay. El encuentro fue ofrecido por las distintas plataformas con derecho para ofrecer LaLiga 123 Tv. El Tenerife lució su indumentaria habitual y el Extremadura cambió el pantalón azul por el blanco.