"Llevamos años luchando para que esto se arreglara". Lo afirma, entre otros, el presidente de la asociación de vecinos de Los Campitos, Evaristo Hernández, aunque lo hace con las dudas propias de quien ha oído otras veces la misma promesa sin que se haya cumplido.

Con ello, Hernández hace referencia a la retirada de una gran grúa de construcción que, desde hace más de una década, permanece en una obra sin concluir en la calle José Arado y Canal.

Allí, en plena burbuja inmobiliaria, se comenzaron a construir unas viviendas de varias alturas que nunca llegaron a acabarse. Y allí permanece, desde entonces, la enorme estructura, cuya base invade parte de la estrecha vía, por la que apenas cabe un coche.

De la peligrosidad de la grúa habían dado cuenta los vecinos en multitud de ocasiones hasta que, hace pocas fechas, desde el ayuntamiento se optó por asegurar con eslingas algunas de las patas y uno de los brazos de la máquina.

Fue algo provisional, ante el miedo de que la estructura completa cayera sobre las viviendas colindantes o sobre las personas o vehículos que transitan por la calle. Ahora falta que se produzca la actuación definitiva.

Este viernes, el concejal de Urbanismo de Santa Cruz, Carlos Tarife, y técnicos del área, se reunieron con varios vecinos de la zona para trasladarles que la retirada de la grúa se realizará, con casi total seguridad, durante los primeros meses de 2019.

Detalló Tarife que Urbanismo maneja ya varios presupuestos para ejecutar la actuación y, además, cuenta con la "colaboración" de los propietarios del terreno.

La retirada de la maquinaria llevará consigo también otras dos intervenciones, ambas demandadas también desde hace años por los residentes en esta y en la vía paralela, Antonio Ramos González.

Por un lado, permitirá recuperar la parte de José Arado y Canal que ocupa ahora mismo la base de la estructura metálica, con lo que la acera quedará "alineada" con el resto de la calle, y, por otro, facilitará que se rellene el hueco que existe entre el muro de las viviendas sin terminar y la calle Antonio Ramos. El tramo afectado está vallado desde hace años.

Ahora mismo, y dado que esta parte de la vía no es del todo segura -ha cedido en varias ocasiones-, el camión de la basura recorre unos 200 metros marcha atrás hasta llegar a los contenedores y luego vuelve a salir por el mismo lugar.

"En José Arado y Canal vive la mayor parte de la gente mayor de Los Campitos y hay dificultades, incluso, para que entre una ambulancia", recalca Evaristo Hernández. "Esto no es una situación de este siglo", añade.

No obstante, no fue este el único asunto tratado en la reunión con Tarife. Los vecinos también dejaron constancia de otro "grave" y "viejo" problema que afecta a José Arado y Canal. En este caso se trata de una vivienda, también a medio construir y abandonada desde hace más de tres décadas, que está al comienzo de la calle.

Los residentes se quejan de que la casa ha sido usada en ocasiones por ocupas, y recuerdan que en ella se han producido incendios a los que han tenido que acudir los bomberos y la Policía Local.

En todo caso, el mayor problema deriva del "alto grado de deterioro" que presenta la construcción. Con las bovedillas rotas y los hierros oxidados, los ciudadanos que residen en la calle temen que la estructura caiga cualquier día.

Es más, en una de las lluvias fuertes que sufrió el barrio hace unos años, lo vecinos reforzaron la base de la vivienda por miedo a que esta acabara desprendiéndose.

En este caso, dijo Tarife, Urbanismo procederá a tomar las medidas de seguridad mínimas en estos casos, en tanto en cuanto se localiza al propietario de la casa, una tarea en la que colaborarán los vecinos. Y más tarde, con los informes técnicos que se van a solicitar, se intentará llevar a cabo una actuación mayor.