Hay cosas que nadie sabe. Hay gente que trabaja en silencio. Pero hay que contarlo, precisamente por el esfuerzo que ello conlleva, echando horas, sin más. Siempre me preocupó el asunto de que los pibes dejaran de ir al colegio. Ya saben, el absentismo escolar. Seguramente saben todos en lo que eso desemboca: tirados en la calle. Carne de cuneta. Malas compañías, ¿nos puede pasar a todos? Sí, seguro que sí.

Pero siempre hay quien da la talla. El Ayuntamiento de La Laguna presta desde hace 16 años el Servicio de Seguimiento del Absentismo Escolar, vigilando a los alumnos de 6 a 16 años, alcanzando a 18.700 estudiantes de Educación Primaria y Secundaria. De hecho, en 2014 recibió el reconocimiento de Unicef de buenas prácticas y se ha convertido en referente en la provincia. ¿Ven? Lo que nadie sabe...

El objetivo es, a través del trabajo con las familias, los estudiantes y los centros educativos, devolverlos a las aulas y lograr que no se queden en las calles. Motivarlos, para que regresen a clase, con nuevas salidas profesionales para mejorar su aprendizaje. El 43% de los menores que fueron atendidos cumplieron luego con la asistencia a clase. En otras cosas puede que no, pero en esto La Laguna es un ejemplo. Ojalá muchos copiaran esta iniciativa. Creo que los chicos lo merecen...