Llegará este otoño. El nuevo Shelby GT500, el tope de cualquier deportivo de calle diseñado por Ford Performance, ofrece su herencia con más de 700 caballos para lograr el coche de calle con más aceleración y la tecnología más eficiente hasta la fecha ofrecida en un Ford Mustang.

Está diseñado para atacar en todos los frentes. En la pista de aceleración está configurado para ofrecer una potencia de más de 700 caballos gracias a una transmisión de doble embrague líder en su categoría. En circuito, el rendimiento mejora aún más gracias a su chasis de carreras, a los neumáticos Michelin específicos y a los discos de freno delanteros más grandes que cualquier otro cupé deportivo estadounidense. En la calle, su diseño aerodinámico ''poderoso'' y las tecnologías de ayuda para el conductor de Ford Performance, hacen que cada momento detrás del volante sea aún más emocionante.

Este es el Ford de serie más potente de la historia. El Shelby GT500 arranca con un motor sobrealimentado con un bloque de aleación de aluminio de 5.2 litros hecho manualmente. Para canalizar la potencia y el par al exclusivo eje de transmisión de fibra de carbono, Ford Performance aprovechó la experiencia en la puesta a punto de la transmisión de doble embrague del superdeportivo Ford GT. El equipo seleccionó una transmisión de doble embrague Tremec de 7 velocidades, que puede realizar cambios en menos de 100 milisegundos, notablemente más rápido que cualquier caja de cambios manual. Esta transmisión de doble embrague está diseñada para una serie de modos de conducción, que incluyen: normal, invierno, drag y deportivo.

El habitáculo, diseñado específicamente para el Shelby GT500, cuenta con materiales de primera calidad, inspirados en las carreras, y acabados únicos dignos de su potencia de clase mundial. Los asientos disponibles para carreras de la marca Recaro, con refuerzos laterales firmes y conductos para arneses de seguridad, ofrecen el más alto nivel de rendimiento.