José Antonio Caro debería convertirse en nuevo jugador del CD Tenerife en los próximos días. La operación, que quedó unos días en "stand-by" como explicó sin referirse concretamente a este nombre el director deportivo Víctor Moreno, se ha retomado desde el pasado lunes con la intención de hallar un punto de encuentro entre las partes que culmine con el deseo del futbolista: llegar a la Isla.

El club pucelano, propietario de sus derechos, acepta ya la salida del portero y que es Tenerife su destino deseado. De hecho, negocia en las últimas horas el reparto de la ficha del futbolista. Es esta la clave para que la negociación llegue a buen puerto. Caro ya ha puesto de su parte renunciando a una cantidad y espera que los clubes hagan el resto. El director deportivo blanquiazul, que no quiere salirse del presupuesto que se ha marcado para esta demarcación, está intentando que el Valladolid acepte compartir la parte restante del salario del guardameta andaluz para cerrar el préstamo antes de la finalización de la presente semana. Si no, valoraría otras opciones. No obstante, el propio Caro no esconde su ilusión por recalar en un equipo en el que considera que podría pelear con garantías por el puesto con Dani Hernández.

El otro escollo, el Albacete Balompié, parece prácticamente salvado con la inminente llegada de Andrés Prieto a la disciplina manchega. A sus 25 años, este portero acepta su salida del Málaga CF en busca de una nueva experiencia para curtirse en Segunda. El tinerfeño Mauro Pérez, director deportivo del conjunto albaceteño, tiene apalabrado al jugador a la espera de que se confirme la salida de Caro.

Las salidas, principal preocupación por ahora

Joao Rodríguez y Tyronne son los nombres que más repite en estos días el director deportivo del Tenerife. Ambos tienen el cartel de descartes para este mercado de invierno y han reaccionado de forma bien distinta. La cosa no parece ir mucho con el primero, que sigue confiando en convencer a José Luis Oltra, a pesar del varapalo que supuso quedarse fuera de la convocatoria el pasado domingo contra el Nástic de Tarragona. No obstante, los agentes del colombiano saben que necesita disponer de minutos y que difícilmente los tendrá en el Tenerife. Su marcha es solo cuestión de que se le busque un nuevo destino. Su coste es exiguo para las arcas insulares. El caso del grancanario es distinto porque tiene un año más de contrato y su ficha es alta. El club insular le ofrece parte de la cantidad que le corresponde hasta final de temporada como indemnización, pero el representante del jugador pide que se le abone completa además de un tramo de la del próximo curso. Con ofertas del exterior y algún interés sin plasmar de la Segunda española, Tyronne pensará bien sus opciones.