Con un pabellón renovado, mejor organizado, sin polémicas con los principales municipios turísticos y, como siempre, con frenética actividad en la primera mañana de la Feria Internacional de Turismo de Madrid (Fitur), el presidente canario inauguró la parte isleña empeñado en dar buenas noticias. Frente a la reducción, real, asumida y cifrada, de turistas extranjeros en 2018 (con unos 500.000 menos, un 3,5%), el jefe del Ejecutivo subrayó la recuperación, con un 5% más (hasta los 1,7 millones), del mercado español, lo que ha permitido compensar la bajada de otros flujos (de Alemania, Inglaterra y Escandinavia) hasta alcanzar los 15,5 millones, el segundo mejor año de la historia tras los 16 que marcaron el récord en 2017.

Sin embargo, los parabienes remarcados ayer por Clavijo no quedaron ahí y anunció que, solo en el mercado de invierno, se espera un aumento del número de plazas aéreas del 4,5% en el total de conexiones y de un 11,4 desde la Península. Otra cosa es que se utilicen todas, pero, de ser así, Canarias pasaría la zona de turbulencias que augura el "brexit", la posible pérdida de conexiones con países como Alemania y las dudas con la desaceleración económica de forma solvente y confirmando sus fortalezas y liderazgo.

Y es que el turismo, como se vaticina desde hace años, seguirá siendo un subsector en auge planetario, no exento de vaivenes, pero punta de lanza económica en un mundo cada vez más interconectado y de cambios constantes. Eso quedó constatado ayer en el pabellón isleño y en el resto de Fitur, la principal feria española.

Según subrayó el presidente canario, ese 11,4% más de plazas desde la Península en invierno respecto a 2018 supone un total de dos millones. Esto representa ciertas garantías ante las incertidumbres sobre la conectividad en este 2019 y el futuro, si bien las Islas, con herramientas como el Fondo de Desarrollo de Vuelos, ha logrado en los últimos años alcanzar la nada desdeñable cifra de 856 rutas con un total de 165 destinos.

El gasto por turista es otro de los fuertes de Canarias, al alcanzar en 2018 los 15.450 millones (un 1,7% más que el año anterior) y al convertirse en el gran objetivo para este 2019, de manera que siga creciendo y reequilibre otros registros. La consejería, además, subraya que, de los 2 millones de aumento en 2017, han seguido viniendo 1,5, con lo que no solo precedían de países competidores como Túnez, Egipto o Turquía (adonde sí se han ido más alemanes). Asimismo, ayer se difundió que, en diciembre, los afiliados a la Seguridad Social en hostelería y agencias de viajes subieron un 1,8 en Canarias, llegando a 153.894. De enero a diciembre, la media fue del 2,7 de incremento, por un 3,5%, en el resto de España.

Eso sí, Clavijo tampoco desaprovechó el momento para reivindicarle al Estado "más compromiso y más trabajo conjunto" en infraestructuras turísticas ante el peso de las Islas en el subsector, en clara alusión a la relación tirante por los compromisos pendientes del presupuesto de 2018 y 2019.

Como suele pasar el primer día de Fitur, hubo momentos frenéticos, con numerosas presentaciones. Clavijo se prodigó y no solo entregó los premios de excelencia y sostenibilidad de La Caixa, sino que fue visitando los puestos de las Islas junto al consejero Issac Castellano, quien insiste en rechazar una ecotasa.

Allí, por supuesto, pululaban muchos políticos, con los presidentes insulares, alcaldes y ediles de Turismo con el habitual carrusel de entrevistas, despliegues y entrega de folletos. Como siempre, y hoy se acentuará más en la comparativa con otras regiones y países, la zona de negociación (con puestos cerrados) y las mesas vivieron una sesión intensa, sobre todo matutina.

Mientras, Tenerife y Gran Canaria alardeaban de sus cifras en aumento pese a la reducción global. El Cabildo tinerfeño, que prevé hasta 60 reuniones estos días, subrayaba, sobre todo, su previsión de incrementar en un 44% la frecuencia de vuelos desde Rusia, pasando de 144 a 208 operaciones y con 34.000 plazas más. Las Islas Verdes (La Palma, La Gomera y El Hierro), por su parte y pese a la creciente ronquera de Casimiro Curbelo, destacaban también sus atributos, su apuesta por la calidad, la sostenibilidad y un turismo de alta capacidad adquisitiva, al tiempo que islas como Lanzarote y Fuerteventura ponían el acento en potenciar el mercado nacional, la gran esperanza isleña de 2019.

Un pabellón mejor acogido

ä ä A diferencia de la edición de 2018, empañada en parte por la polémica del puesto propio que reivindicaban y se autorregalaron municipios turísticos como Adeje, Arona, Guía de Isora, San Bartolomé de Tirajana o Mogán frente a las tesis contrarias del Gobierno, ayer no hubo ninguna arista de distensión relevante. Al contrario. La nueva distribución del pabellón canario, con más mesas, el puesto de prensa reubicado y las Islas bien dimensionadas en la parte principal, así como el espacio para dichas localidades pero bajo la promoción conjunta, fue muy bien acogida. Además, la iluminación estrenada, bastante más llamativa, el puesto de frutas isleñas y la sensación de espacio mejor aprovechado reforzó la impresión generalizada de que se había avanzado en este ámbito. Esas sensaciones podrán refrendarse hoy, día en el que el pabellón canario, a diferencia de la mayoría de regiones españolas y de múltiples países, bulle con negociaciones cruzadas y constantes, en una clara prueba de la pujanza del destino. Eso sí, quizás se echó de menos más ambiente festivo y musical, así como alguna visita de relieve.

Una feria afectada por los taxistas y que requiere días para disfrutarse