Un partido de otra dimensión, el 53 entre Novak Djokovic y Rafael Nadal, acontecerá mañana -8:30 horas- con motivo de la final del Abierto de Australia de tenis. El serbio, número uno mundial, certificó ayer un nuevo capítulo de una de las contiendas más repetidas en toda la historia del tenis, tras superar con comodidad al francés Lucas Pouille (6-0, 6-2 y 6-2).

El cemento del Rod Laver Arena verá a dos leyendas de la raqueta que aglutinan 31 Gran Slams en su poder: los 17 -uno en Australia- con las que cuenta el manacorí y los 14 -seis en Australia- que ostenta el de Belgrado. Uno de los dos se acercará a las 20 con las que reina el suizo Roger Federer.

En los cara a cara, Djokovic domina ligeramente al haberse impuesto a Nadal en 27 ocasiones. Con dos victorias menos sobre el serbio marcha el deportista español. El último encuentro entre ambos se celebró con motivo de las semifinales de Wimbledon 2018. Triunfó el deportista balcánico en un choque a cinco sets que se disputó en dos días diferentes.

Nole lleva ocho victorias seguidas sobre Rafa en pista rápida (14-5 en el total), desde que el mallorquín le batió en la final del US Open de 2013. No se ven en un encuentro definitivo de Grand Slam desde Roland Garros 2014 -Nadal alzó la Copa de los Mosqueteros-.

El Djokovic-Nadal será la reedición de la final en Australia de 2012, la más larga de la historia del Grand Slam -cinco horas y 53 minutos de duración-. En aquella ocasión levantó los brazos el serbio