Cada habitante de las Islas aporta un euro anual que se destina a distintos programas de ayudas a canarios que forman parte de la diáspora. El 80% de esas partidas económicas se destinan actualmente a los isleños que residen en Venezuela. "Esto es algo que no todos entienden. Sobre todo, porque aquí también hay gente que lo pasa mal, pero muchas personas entienden que allí se está dando una situación de emergencia humanitaria que requiere de la existencia de este tipo de compromisos", señala Luis Guillermo Padilla, viceconsejero de Acción Exterior del ejecutivo que preside Fernando Clavijo.

Entre 40.000 y 45.000 personas. Esa es la cifra, a la espera de que salgan los datos oficiales recogidos en el censo de 2018, de canarios e hijos de estos que residen en la actualidad en Venezuela. "El contacto con las personas que trabajan para el Gobierno de Canarias allí es permanente -dos personas están destinadas en la oficina de Caracas, aunque una de ellas suele realizar sus cometidos en el estado de Vargas- y las noticias no son buenas", avanza Luis Padilla. "La situación es de tensa espera, en la calle la gente está harta del gobierno de Maduro", explica antes de revelar algunos datos de unas encuestas ejecutadas por alumnos de distintas universidades locales.

Los datos que se desprenden de esos sondeos son cristalinos. El 80 por ciento de la población ya admite que no quiere a Maduro de presidente, el 67% de los venezolanos perdieron 11 kilos de peso en 2017, el 37 por ciento vive por debajo del umbral de pobreza... "Esos datos son aún peores cuando interpretas diversos análisis realizados por The Economist en los que se advierte que Venezuela es el país más corrupto de América Latina y, además, el peor gobernado. Además, en las últimas dos décadas, pasó de ser la región más rica a la más pobre", subraya el viceconsejero de Acción Exterior antes de entrar en un capítulo que es decisivo. "En 2013 se producían 3 millones de barriles de petróleo diarios que se vendían a 100 dólares la unidad. Hoy, en cambio, se produce un millón al día y el precio del barril ha caído hasta los 60 dólares", compara el economista canario.

Padilla va más allá a la hora de explicar el retroceso brutal que ha experimentado un país que se ha quedado sin soluciones financieras. "La medida estrella que se le ocurrió a Maduro el año pasado fue quitarle cinco ceros a la moneda".

Un año y medio lleva Padilla al frente de una viceconsejería a la que accedió para coger el relevo a Pedro Jorge Rodríguez. "Cada día allí es como un máster económico. Las dificultades se multiplican y las soluciones no siempre son efectivas y rápidas", comenta el ex director general de Proexca (1989-1994) y el que fuera ex director general de Relaciones con África del Gobierno de Canarias (1998-2007), entre otros cargos.

Una de las partidas económicas que Canarias destina cada año a los isleños que residen en Venezuela -en el cuadro superior solo aparecen las más destacadas- se incluyen en las cuentas de la Fundación Española de Salud: es un programa que funciona siguiendo unos parámetros similares a los de la Seguridad Social española que da cobertura a unos 1.300 canarios. "Ahora es cuando usted me pregunta que si hay entre 40 y 45.000 isleños, cómo establecemos los criterios para atender a esas 1.300 personas", se adelanta Luis Guillermo Padilla.

Una convocatoria anual evalúa una serie de conceptos que se tienen en cuenta a la hora de elaborar ese listado: tener más de 65 años, residir en Venezuela, haber nacido en Canarias, no recibir otras prestaciones sociales, estar en una situación de precariedad económica y carecer de un seguro médico son algunas de las cuestiones que "ayudan" a ganar puntos para entrar en la base de datos del FES.

Seis consultorios médicos -el más importante está ubicado en Vargas y dispone de doce especialidades- dan servicio a unos tres mil canarios y su coste anual ronda los cien mil euros.

Los planes de asistencia domiciliaria (95.000 euros), la gestión de tres centros de día (112.000 euros), la administración de varias residencias especializadas para personas mayores (120.000 euros) y, sobre todo, la adquisición de tarjetas prepago para comprar alimentos y medicamentos -se carga con 15 euros cada dos meses- y los 300.000 extras que se añadieron al apartado de ayudas básicas: "El sistema de tarjetas es muy eficiente porque todo queda registrado. Si vas a comprar pan, esa compra se refleja en el resumen", explica el alto cargo del gobierno de Canarias. "Las avenidas están vacías y las huelgas se suceden pero todavía funcionan los teléfonos", asegura Padilla en un momento de la conversación en el que adelanta que no hay nada previsto para las próximas semanas... La última vez que alguien del gobierno canario voló a Caracas fue el 21 de enero para asistir a una reunión del FES".

LAS CIFRAS

600.000 euros se destinan al FES, un programa que presta auxilio sociosanitario a unas 6.000 personas, la mitad de origen canario. Esa partida crecerá este año hasta los 650.000 euros.

100.000 euros van directamente a 6 consultores médicos en los que se atiende a canarios, y descendientes de isleños. El más destacado es el que está ubicado en Vargas.

95.000 euros tienen como destino varios planes de asistencia domiciliaria que, además, se complementan con los 112 euros que van a tres centros de día y los 120.000 que se inyectan a las economías de residencias de mayores.

300.000 euros forman parte de una partida extraordinaria que se destina a la "recarga" de las tarjetas para adquirir alimentos y medicamentos.