El alcalde de Santa Cruz de Tenerife, José Manuel Bermúdez, ha admitido este martes que "por supuesto" que han subido los precios del alquiler en la capital tinerfeña como consecuencia al alquiler vacacional pero, ha dicho, "todavía" no es "un problema gordo".
Bermúdez, en rueda de prensa, ha opinado que la comunidad de vecinos tiene que tener la oportunidad de decidir por mayoría si permite o no el alquiler vacacional en el edificio para así evitarse "algunos problemas" que ya se han detectado.
Ha reconocido que desconoce el número exacto de viviendas que se destinan a alquiler vacacional porque no hay un registro y porque "la mayor parte de ellas no están reguladas".
El alcalde ha señalado que el borrador de ordenanza que regulará el alquiler vacacional, que prevé que se apruebe "en un par de meses", pretende influir en el precio del alquiler en Santa Cruz de Tenerife.
Se trata de una "regulación complicada" para el alcalde, que está "seguro" de que "va a suponer tribunales", que en otras ciudades españolas han fallado a favor del alquiler vacacional y de la "desregulación".
Ha señalado que hay otros ayuntamientos que lo han intentado y que los tribunales han tumbado sus ordenanzas porque "no es fácil ordenar esta actividad económica nueva" y que ha dicho que ha supuesto un incremento de los costes del alquiler en determinadas zonas de la ciudad.
El borrador limita esta modalidad alojativa a las viviendas de más de diez años de antigüedad y en la zona de los conjuntos históricos.
Según el borrador, se autoriza la vivienda vacacional en las plantas bajas de las edificaciones y construcciones, y situaciones equivalentes cuando bajo las mismas no existan viviendas, así como en aquellas plantas que tengan entrada independiente.
Bermúdez ha indicado que la intención del Ayuntamiento no es prohibir el alquiler vacacional sino intentar regularlo desde el urbanismo, área en la que el consistorio tiene competencias.
La solución definitiva pasa por que el Gobierno español modifique la ley de arrendamientos urbanos, ha opinado el alcalde, quien ha lamentado que los ayuntamientos no tengan demasiadas herramientas, salvo las urbanísticas, para regular el alquiler vacacional.