La Dirección General de Salud Pública del Gobierno canario, con apoyo del Plan Nacional sobre Drogas y de la Federación Canaria de Municipios (Fecam), presentó ayer el programa de servicio responsable para intentar frenar el consumo abusivo de alcohol y drogas en locales de hostelería. El objetivo es que el personal y los empresarios de dicha actividad económica (bares o locales de ocio nocturno, por ejemplo) sean agentes activos para evitar que menores y jóvenes caigan en prácticas de riesgo con las bebidas alcohólicas y las sustancias estupefacientes por las consecuencias negativas que las mismas tienen para el resto de su entorno y la sociedad.

La iniciativa fue presentada ayer por parte de Luz Marina Moreno, jefa del Servicio de Ateción a las Drogodependencias del Ejecutivo autónomo; Eva María García, alcaldesa de Buenavista y vocal de la Comisión de Bienestar Social de la Fecam; María Concepción Brito, regidora de Candelaria, así como Libe Mariscal, de Hazkunde, colaboradora del Plan Nacional sobre Drogas. El Ayuntamiento de Candelaria ha desarrollado una experiencia piloto en este ámbito, que se ha centrado en un programa formativo orientado a los dueños de los 132 locales de hostelería existentes en dicho municipio. El citado consistorio remitió una carta a todos los empresarios, que acudieron a ocho talleres para explicarles los objetivos de este proyecto.

Con posterioridad, 82 dueños de negocios de hostelería y 12 policías locales tomaron parte en un curso específico. En una tercera fase de esta experiencia, que se enmarca en el IV Plan de Drogodependencias de la Villa Mariana, 23 de esos propietarios de establecimientos hosteleros recibieron un sello por sus buenas prácticas. La alcaldesa explicó que el resto de empresarios seguirán recibiendo formación durante los próximos meses.