Va a liderar la regeneración de Coalición Canaria (CC) en La Palma de cara a las elecciones del 26 de mayo, donde estará al frente del listado que optará al ejecutivo regional en compañía de Jonathan Felipe, actual alcalde de Breña Alta, Sergio Rodríguez, alcalde de El Paso, y Susa Armas, directora general de Protección de la Naturaleza del Gobierno de Canarias. "Asumir este encargo es un reto, pero contamos con un equipo sólido... Hemos conseguido cerrar la mejor candidatura posible en un ciclo político que será decisivo para la isla de La Palma", cuenta Nieves Lady Barreto, aún consejera de Política Territorial de este archipiélago. "En esta lista nadie va a levantar la mano en contra de La Palma", avisa en el inicio de una entrevista en la que también hablará de sus planes de futuro si finalmente es ratificada para encabezar la nómina de CC al Cabildo de la Isla Bonita.

¿Cuáles son sus reflexiones en las primeras horas de vida de la candidatura que encabezará al ejecutivo regional?

En el Parlamento que viene las islas no capitalinas van a tener muy complicado disponer de la representación que han tenido hasta la fecha. Eso significa que conseguir cosas, en nuestro caso en beneficio de La Palma, va a estar un poco más complicado.

Lo que nadie podrá decir es que esta es una lista acomodaticia, ¿no?

Esa fue una de las cuestiones que más valoramos en el último Consejo Insular del Partido, dar forma a una lista en la que hubiera personas reivindicativas. Los alcaldes que van en la lista no son tranquilos; son personas que siempre han levantado la voz en favor de los intereses de sus municipios. Susa, al igual que yo, ha sido exalcaldesa y, creo, que todas las experiencias acumuladas en los gobiernos municipales pueden ser muy útiles a la hora de configurar el próximo Parlamento.

Experiencia política hay, pero da la sensación de que se necesita actuar en la base del partido, es decir, que hay que apuntalar los cimientos palmeros de CC.

Es cierto que no contamos con una trayectoria política demasiado larga, pero los cuatro tenemos un pasado en la administración local que nos puede dar una perspectiva diferente a la hora de acometer proyectos por el bien de La Palma. Lo he dicho en varias ocasiones y lo repito hoy: al gobierno regional hay que llegar después de haber cumplido una etapa en la administración local. Las estructuras del partido las hemos renovado de forma tranquila; la base está consolidada. En esta lista nadie va a levantar la mano en contra de La Palma.

¿A qué se refiere?

En esta legislatura hemos asistido a momentos en los que diputados del PSOE y PP palmero han levantado la mano en contra de los intereses de La Palma. Por ejemplo, cuando se votó en contra de la Ley de las Islas Verdes, en contra de la Ley del Suelo o cuando se rechazó un presupuesto en el que se incrementaban un 75% las inversiones que se iban a realizar en la Isla.

¿Sus respuestas están en clave de cuatro; confía en colar el cien por cien de esta lista en la Cámara?

Sabemos que ese es un reto complicado, pero vamos a luchar por el cuarto. Está claro que el panorama parlamentario va a cambiar, pero sentar un cuarto diputado en la Cámara Regional nos garantiza que no habrá nadie que levante la mano en contra de La Palma.

¿Habrá que pelear voto a voto?

El voto va a estar polarizado. Hay un voto de izquierda que cada vez está más a la izquierda, y otro voto de derecha que se está instalando a la derecha de la derecha... Coalición Canaria es la única alternativa a los discursos radicales que se han propagado por toda la geografía nacional. El consenso se logra llevando los debates a una posición centrada que es la que siempre ha defendido Coalición Canaria. Una de las enseñanzas de esta legislatura son los acuerdos que se han tenido que cerrar, a través del diálogo, para sacar adelante temas que eran prioritarios. En ese centro es donde pueden confluir los partidos, los más radicales ya le digo que no, que desean de verdad colocar los intereses de las Islas por delante de las ambiciones personales de sus miembros.

¿CC volverá a apostar por el consenso?

Yo estoy en Coalición Canaria porque creo que en un territorio como el que vivimos es importante tener un pensamiento nacionalista, pero también soy española... Los posicionamientos de centro son muy difíciles de mantener con vida hoy en día, pero casi todos los partidos están obligados a no alejarse de él si lo que persiguen son unos valores democráticos.

Usted conoce los asuntos asociados a la Consejería de Política Territorial, pero hay otras cuestiones que están conectadas con la competencia con el plátano, las dificultades de los regantes, el alquiler vacacional... ¿Qué retos debe abordar La Palma en los próximos años?

La Palma está sufriendo un ciclo financiero complicado: llevamos unos cuantos años en los que ya no tiramos de la economía de Canarias. El retroceso de la Isla es imparable; junto a El Hierro, tenemos la renta per cápita más baja. Con esto no quiero decir que no nos podemos comparar, pero es evidente que la extensión territorial de La Palma y El Hierro no es la misma... Ahora mismo tenemos los instrumentos para salir de ahí. Es verdad que ha costado mucho reorganizar el partido y que la crisis pasó una factura mayor a los palmeros, a los gomeros y a los herreños, pero disponemos de los mecanismos para modificar una realidad que es aterradora. Algo está pasando. No es normal que con unas posibilidades económicas mayores y una población mucho más grande nuestra renta per cápita sea peor que la de La Gomera...

¿Cuáles son esos instrumentos?

La consejería de Política Territorial no tiene mucho dinero, pero en estos cuatro años ha trabajado para desarrollar una Ley de Islas Verdes que puede generar muchos beneficios a La Palma... Contamos con la aprobación de un REF, que por primera vez incluye no solo el concepto de doble insularidad para cualquier aspecto económico que se pueda dar en las Islas, con lo que todo eso implica de beneficios para las Islas no capitalinas, sino que en él se recogen medidas específicas de bonificación e inversiones. La Ley del Suelo, por último, permitirá modernizar las actividades del Sector Primario para que estas puedan llegar a ser complementarias. Con esas tres cosas, unido a la aprobación de la Ley de Servicios Sociales, y unas vías de financiación más eficaces para las islas menores van a marcar el futuro a corto plazo de La Palma. ¿La Isla debe definir hacia dónde quiere caminar y qué proyectos quiere desarrollar? Esa es una misión que debe liderar el Cabildo Insular de La Palma. Lo que no se puede es seguir colocando parches y volver su mirada al otro lado. ¿Dónde está el proyecto de Isla, cómo queremos desarrollar el modelo turístico o cuándo podremos recuperar el terreno perdido en relación al resto del Archipiélago? Un plan de turismo no solo consiste en llenar unos cuantos vuelos o cerrar alguna que otra alianza con un promotor, esa estrategia hay que desarrollarla sobre el terreno. En La Palma no existe una idea de Isla que esté impulsada por el Cabildo.

¿Cuál es su análisis a la hora de explicar el estancamiento que está denunciando?

Lo que ha pasado en los últimos años en La Palma es que no se ha tenido claro cuál era el camino y, por lo tanto, hay que buscarlo... Tenemos que estar preparados para cometer alguna que otra equivocación, pero si no nos ponemos en marcha el retroceso puede llegar a ser mucho mayor. No todo lo que tenemos en mente saldrá adelante, pero es necesario que empecemos a caminar.

¿Cómo hay que interpretar lo ocurrido con el Fdcan durante la legislatura que está a punto de agotarse?

El Fondo de Desarrollo de Canarias, que es una inversión que el Ejecutivo autonómico entrega a todas las Islas, tenía que empezar a ejecutarse con infraestructuras municipales en 2017, pero en La Palma fue un calvario desde sus inicios. Al final se acabaron los plazos, este Cabildo tuvo más prórrogas que cualquier otro para justificar el uso de esos fondos y la posición de Coalición Canaria siempre fue firme en torno a la idea de que no podíamos permitir que la Isla perdiera dinero. El presidente Clavijo dice que fue "un tirón de orejas", pero si no damos ese toque y vendemos verdad, el Cabildo no se habría sentado a solucionar los problemas del Fdcan de hace dos años. Ahora está ejecutando las obras de 2018 y tiene de plazo hasta el mes de junio, es decir, que la gestión que hicieron desde la institución insular no fue precisamente modélica. Esperemos que cumpla los plazos previstos y, sobre todo, que permita una mayor autonomía a los ayuntamientos, que por otro lado es algo que sí que ocurre en el resto del Archipiélago.

Volviendo al origen de la entrevista, ¿para que se pueda dar un proceso de renovación de CC en La Palma también hay que abordar la lista diseñada con el propósito de recuperar el Cabildo?

Ese es un proceso que en el Consejo Político del otro día decidimos estudiar la candidatura completa al Cabildo de La Palma después de la semana de carnavales. Lo que está claro es que para este partido esa es institución resulta clave para poder sacar adelante los proyectos que deberán marcar el futuro de La Palma a corto plazo.

¿La atrae estar al frente de esa lista?

Ahora mismo yo estoy en la lista del Parlamento, pero soy consciente de que tengo unas responsabilidades como secretaria general del partido y como miembro de CC en La Palma. Lo que sí le digo es que vamos a trabajar para tener la mejor lista. No solo queremos armar una buena candidatura, sino lograr el apoyo externo de personas que puedan ayudar a construir el mejor proyecto... Para Coalición Canaria es fundamental que La Palma salga del atasco económico y social en el que se encuentra.

¿Usted es una de esas personas?

Yo estoy en el bando de las personas que quieren que las cosas pasen. A veces eso no basta, porque lo importante no es querer sino propiciar cambios. En ese sentido, yo y mis compañeros queremos que en La Palma cambien las cosas. No podemos tener un Cabildo que sea un ayuntamiento más, que no tenga peso en la sociedad palmera. En el pasado sí que lo tuvo con José Luis Perestelo, pero en los últimos tiempos ese liderazgo lo han ocupado municipios como El Paso o Breña Alta.