La Gerencia de Urbanismo de Santa Cruz extenderá a todas las ludotecas de la capital las inspecciones anunciadas la semana pasada a los centros infantiles y guarderías del municipio.

Así lo anunció ayer el concejal del área, Carlos Tarife, tras reunirse con la presidenta y el secretario de la Asociación de Centros Infantiles de Tenerife (Acinte), Marina Amador y Mario Ramos, respectivamente.

"Las inspecciones se harán desde el punto de vista urbanístico, porque esa es la única competencia que tiene el ayuntamiento. Es decir, comprobar que el local que está como ludoteca cumple con los requisitos", aclaró.

De hecho, el concejal avanzó que ya se han dirigido por escrito a la Consejería de Educación para solicitar información de los centros y en los próximos días se les requerirá a estos la documentación correspondiente. "Empezamos ya", advirtió.

Según estimaciones no oficiales, en el municipio operan en estos momentos alrededor de 20 ludotecas. Se definen como tales aquellos espacios lúdicos para que los niños vayan a hacer actividades en horario extraescolar. Sin son menores de 3 años, deben estar acompañados de un adulto.

"Lo que no podemos hacer es denunciar que no cumple el horario con los menores. Esa es una competencia del Gobierno de Canarias", detalló el concejal de Urbanismo, quien reconoció que hasta que los ayuntamientos no tengan una herramienta que regule las actividades que puedan ejercer este tipo de centros "no podrán actuar en esta materia".

Con ello hace referencia al decreto que ha elaborado la Consejería la Consejería de Empleo, Política Social y Vivienda, pero que aún no ha sido aprobado al estar pendiente de que se modifique la Ley del Menor. Esa nueva norma "englobará" el bienestar y la seguridad de los menores de 0 a 18 años.

"El ayuntamiento solo puede supervisar si la licencia que dio en su momento es para la actividad que se realiza", incidió la presidenta de Acinte. "Hoy en día hay un vacío legal en este aspecto de ludotecas, ocio infantil y actividades lúdicas no convencionales", añadió Mario Ramos.

¿Se ha producido algún movimiento desde que se denunció la situación hace unos días? "Quien único se ha movido es el ayuntamiento. Por desgracia, no es un tema educativo", reconoció Marina Amador, quien insistió en que "alguien tiene que hacer algo" con todos los centros que, tras tres años, no se adaptaron al decreto 201/2008, de 30 de septiembre, por el que se establecen los contenidos educativos y los requisitos de los centros que imparten el primer ciclo de Educación Infantil en la Comunidad Autónoma de Canaria.

Cabe recordar que, la semana pasada, Tarife anunció que iban a inspeccionar todos las escuelas infantiles de Santa Cruz. Según datos de Acinte, tres de los algo más de 30 centros de este tipo que prestan servicio en la capital tinerfeña son "alegales", pues aún están pendientes de que la Consejería de Educación les otorgue la correspondiente autorización.

En total, en Santa Cruz hay en estos momentos 36 escuelas infantiles -para niños de 0 a 3 años, dos de competencia municipal (Tara y Faina), cinco que dependen de varias consejerías y 26 privadas.