El Iberostar Tenerife no pudo llevarse una victoria de Jerusalén frente al Hapoel, pero sí que se marchó de Israel un buen resultado para el encuentro de vuelta que se disputará dentro de una semana en el pabellón de Deportes Santiago Martín, donde se decidirá qué equipo alcanza la Final a Cuatro de la Liga de Campeones FIBA. Brillante encuentro del equipo tinerfeño, que supo mantener la calma cuando el partido estaba en contra y tomar ventajas en el electrónico para poner a su rival contra las cuerdas. El tercer cuarto resultó decisivo para los tinerfeños, ya que, tras la ventaja de nueve puntos que logró el conjunto israelí antes del descanso (45-36), los tinerfeños salieron de vestuarios con una predisposición clara y dispuestos a todo. Lograron un parcial de 0-17 (45-53) y le dieron la vuelta a un partido que tenían complicado. Fue, sin duda, una reacción importante en un partido que se empezaba a complicar debido al potencial que ofrecía el conjunto local. Los tinerfeños, desde los primeros instantes, jugaron de tú a tú ante un rival muy físico y poderoso, y supieron controlar en todo el momento el choque, aunque ya en el segundo cuarto el equipo israelí logró irse de esos nueve puntos mencionados. El Iberostar Tenerife estaba pasando por un situación delicada, porque estaba a un paso de que el Hapoel rompiera definitivamente el encuentro. No fue así y, tras unos pequeños ajustes realizados en el descanso por Txus Vidorreta, entrenador del conjunto lagunero, los visitantes salieron con una actitud más ofensiva y utilizando sus mejores armas. En esta ocasión fue el juego interior, y tanto Colton Iverson como Sebas Saiz, así como Tim Abromaitis empezaron marcar diferencias en el juego. Colton fue, en principio, el que empezó, pero Saiz no bajó el nivel cuando estuvo en la cancha. No permitieron segundos tiros del Hapoel ni se perdieron balones en ataque. Es decir, se fueron cumpliendo los guiones que pedía Vidorreta. Así le dieron la vuelta al resultado ante un adversario desesperado y que no sabía cómo darle un giro al encuentro. Y es que su primera canasta en el tercer cuarto fue cuando faltaban tres minutos para terminar. Fue en ese tramo final del tercer cuarto y en el inicio del último periodo cuando el Hapoel intentó poner de nuevo el resultado a su favor y, aunque estuvo más acertado que los aurinegros en los últimos diez minutos, se encontró con un Iberostar Tenerife muy bien puesto en la cancha, con mucha seguridad y consciente de que el tanteador estaba cayendo de su lado. Cualquiera de los dos equipos se podía llevar la victoria, pero al final fueron los israelíes los que terminaron ganando merced a su acierto en los instantes finales. El desenlace, el próximo miércoles en el Santiago Martín.

Colton Iverson, el mejor

El pívot norteamericano firmó un gran partido, superando la dificultad que presentaba un rival muy potente en el rebote. Colton metió 20 puntos, capturó 12 rebotes y puso un tapón, para alcanzar una valoración de 24, la más alta entre los dos equipos. Más allá de esas cifras, la personalidad de un jugador así aporta intangibles al equipo.

Feldeine, el peligro

Los focos estaban sobre el pívot Stoudemire, que no salió en el quinteto titular rojo y jugó solo poco más de 16 minutos, pero la referencia ofensiva de los israelíes fue un viejo conocido de la afición española: Feldeine jugó 32 minutos, anotó 18 puntos, cogió 4 rebotes y dio 4 asistencias. La valoración fue la más alta de su equipo, 19 en total.