La Gerencia de Urbanismo de Santa Cruz ha ordenado el desalojo inmediato de la vivienda número 28 de la calle Miraflores, una casa en la que, a pesar de su estado ruinoso, se ejerce la prostitución.
Una resolución del concejal del área, Carlos Tarife, da 72 horas a los propietarios del inmueble, una vez que reciban la notificación, para que lleve a efecto esta decisión y, además, les exige adoptar una serie de medidas de seguridad.
Entre otras, la instalación de un apuntalamiento preventivo en todas las plantas del inmueble, la demolición puntual y controlada del techo del cuarto de la azotea y colocación de malla anticascotes.
La inspección de los técnicos municipales se produjo tras una alerta recibida el pasado 20 de marzo, después de un derrumbamiento en el interior de la vivienda.
En su visita al interior de la casa, los técnicos, acompañados de la Policía Local, detectaron, entre otras deficiencias, que el techo del cuarto de cubierta, aún en pie, está en situación de ruina inminente, y alertaron de que en las fachadas, tanto la exterior como las interiores de patio y muretes de cerramiento, existe riesgo de caída de cascotes y/o desprendimiento de material pétreo.
Además, advirtieron de que existía riesgo de desprendimiento del falso techo de las estancias de la planta alta, y que se desconocía el estado de los de la planta baja.
La resolución de Urbanismo ha sido trasladada también al Instituto Municipal de Atención Social (IMAS), para que preste apoyo y auxilio en el realojo de las personas afectadas, y también a la Policía Local, para que procede al desalojo de los ocupantes de la casa si no se cumple con lo ordenado.
La resolución fija también multas coercitivas para los dueños en caso de incumplir la orden y la posibilidad de actuar en ejecución subsidiaria.
Ayer, Carlos Tarife volvió a criticar la "inflexible" postura del Cabildo con el patrimonio, "que primero aceptaba los informes del Cicop y luego ya no le valían".
"Esa situación está produciendo hechos como este: que las casas estén cada vez peor", sostuvo. "Y nosotros no podemos arriesgarnos a que pase algo", añadió el edil.