SE ATRIBUYE a Paulino Rivero la frase de que los pactos del futuro serán más fáciles si se firman con el PSOE, porque sus políticas sociales se parecen a las de Coalición Canaria. Esperamos que Paulino no haya pronunciado tamaña memez, entre otras cosas porque todavía el PP no ha dado a conocer su calendario social, de cara a los comicios, y no puede existir la comparación. Si con lo del PSOE se refiere a lo acontecido hasta ahora, fantástico. Unas reformas que no se han puesto en marcha, unas pensiones recortadas, los cheques-bebé desaparecidos, los 426 euros fuera de órbita y más de cuatro millones de parados y hambre, mucha hambre. Pues que vivan las políticas sociales de la izquierda en el poder. Quizá Paulino se refería a otra cosa.

No deberá fiarse Coalición ni del PP ni del PSOE, que pueden hacer pinza para anular a los nacionalistas en las instituciones. Este es el verdadero peligro: que los partidos estatalistas se unan para que Canarias no tenga una vía de escape hacia su camino natural: la independencia. Nosotros, en el lugar de Rivero, no nos fiaríamos ni de la sonrisa bobalicona de Zapatero ni del barbecho de Rajoy. Los dos van a lo suyo. Y Coalición Canaria debe ir por los canarios. A defender sus intereses y a no venderse más veces por un plato de lentejas.

Por cierto, que sería bueno recordar cuánto se ha cumplido de aquel documento firmado en Madrid cuando el apoyo de CC a los presupuestos socialistas. Nos tememos que poco o nada de lo pactado ha sido llevado a la práctica. Ahí es donde debe insistir la memoria nacionalista: en que no nos tomen más el pelo y en que el poder central no humille más a estas islas que quieren volar solas.

Paulino es un hombre experimentado y serio. Pero no debe cometer torpezas. Paulino es perro viejo en política, pero no debe dar la sensación a su electorado que se decanta por un pacto con los socialistas. Ideológicamente, los socialistas están mucho más lejos de CC que el PP, aunque ya sabemos que las ideologías en Canarias importan cada día menos. No se trata de un problema ideológico, sino práctico.

Sobran declaraciones de este tipo y en este momento. Los pactos, en el suyo. Los tiempos los marcan los acontecimientos. A lo mejor el electorado de CC no le perdona a su líder que se acerque demasiado a quienes han arruinado el país. Además, ¿no será mejor jugar a ganador? De cualquier forma, algo traman PSOE y PP con relación a CC. Y el que avisa no es traidor.