"Cinco días valiosos e inolvidables". Así definió el Rey Juan Carlos su última visita oficial a Canarias, que le llevó del 22 a 26 de noviembre de 2006 a las siete islas, siguiendo los pasos del recorrido que había realizado, justo cien años antes, su abuelo, Alfonso XIII.

A lo largo de su reinado, Don Juan Carlos y Doña Sofía han realizado seis visitas oficiales a Canarias, en 1986, 1990, 1994, 1996, 2005 y 2006, si bien los Monarcas han viajado a las islas en una docena de ocasiones para presidir actos públicos de carácter político, social o militar, así como en visitas privadas.

Su último viaje oficial a las islas siguió los pasos del realizado por Alfonso XIII en 1906, y comenzó en Tenerife, donde el Rey visitó el Parlamento de Canarias, que le concedió su Medalla de Oro, el populoso barrio de Taco y San Cristóbal de La Laguna.

El 23, los Monarcas se desplazaron a El Hierro, donde recorrieron la calle Real de Valverde, admiraron el espectacular paisaje del Valle del Golfo desde el Mirador de la Peña, del artista César Manrique, y conocieron la gran apuesta de futuro de los herreños, la central Gorona del Viento, que hoy está a punto de ser inaugurada.

Ese mismo día, por la tarde, Don Juan Carlos y doña Sofía continuaron su periplo por La Gomera, donde almorzaron en el Parador Nacional, asistieron a una demostración del silbo gomero, el ancestral lenguaje silbado de la isla, y recorrieron varios lugares ligados al histórico viaje de Colón en el Descubrimiento de América.

El 24, los Reyes se desplazaron a La Palma, donde contemplaron la calesa con la que Alfonso XIII paseó por la isla un siglo antes, recorrieron las calles de Los Llanos de Aridane y Santa Cruz, mantuvieron un encuentro con los agricultores y conocieron los detalles de uno de las instalaciones científicas más avanzadas del país, el Gran Telescopio de Canarias.

Al día siguiente, se desplazaron a Fuerteventura, donde Don Juan Carlos llamó a los canarios apostar por un desarrollo sostenible, inauguró con Doña Sofía la restauración de la Casa de los Coroneles, se entrevistó con la familia de Eduardo Chillida y animó a los majoreros a aprovechar "los enormes atractivos" de su isla.

Por la tarde, cruzaron a Lanzarote, donde inauguraron el centro de Salud de Santa Coloma, en Arrecife, visitaron el municipio de Teguise y se reunieron con una representación de la sociedad isleña.

La viaje concluyó el domingo 26 en Gran Canaria, donde Don Juan Carlos volvió a visitar el yacimiento prehispánico de la Cueva Pintada de Gáldar, paseó a pie por una de las calles más populares de Las Palmas de Gran Canaria, Triana, recorrió el barrio histórico de Vegueta y asistieron a misa en la catedral de Santa Ana.

Acompañados en todo momento por el presidente de Canarias, Adán Martín, y varios ministros, Don Juan Carlos abordó en sus diferentes intervenciones públicas la vigencia de la Constitución como marco de convivencia, problemas en aquel momento apremiantes, como la inmigración ilegal, y cuestiones de futuro, como las opciones de desarrollo sostenible que observaba en el archipiélago.

Y todo ello, subrayó el Monarca en su discurso de despedida en Gran Canaria, "dentro del profundo compromiso de la Corona con Canarias, conforme a su firme vocación de servir a España y a todos los españoles".