Tras intentarlo en 2014, Andrés Orozco dejó recientemente la dirección de La Caixa en Canarias, el mayor banco de las Islas. Desde ahora, seguirá ayudando a la sociedad desde la Fundación, centrándose, sobre todo, en proyectos sociales, ONG, bancos de alimentos e iniciativas solidarias o que abordan cuestiones tan delicadas como las enfermedades raras. En lo que sigue, repasa su trayectoria y la situación bancaria y económica en general.

¿Por qué este cambio?

Hay ciclos en la vida. He dedicado 31 años a esto, aparte de hacer otras cosas antes por mi formación, pero no terminaba de encajar. Por suerte, me encontré la banca en mi camino y, aunque no tenía familiares ni casi amigos, me enamoré de esta profesión. Además, tuve la suerte de encontrarme a La Caixa. Estaba en el Santander, luego fui al Banco Islas Canarias al llamarme alguien muy importante en mi vida, Alejandro Plasencia, mi tutor profesional junto a Isidro Fainés, y, al año, lo compra La Caixa.

O sea, ha sido decisión suya...

Sí, pero ya lo intenté en 2014 y decisiones así no son unilaterales, pues se me dijo que esperara.

Lo convencieron, vaya...

Sí. David Coba, con quien tengo gran relación desde la fusión con CajaCanarias. Acabó su carrera en 2014 y pudimos irnos juntos, pues el barco ya está bien amarrado tras una integración compleja. Mis jefes creyeron que aún no era el momento y bastaba con un guiño para quedarme. Ahora lo retomé, aunque también tuve un pequeño proceso de salud, y con esos tropiezos siempre te replanteas la vida y las prioridades.

¿Y qué prioridades tiene ahora?

Ayudar.

¿Profesionalmente...?

Trabajaré en La Caixa hasta el último día, pues le debo mucho. Quiero ayudar, ya que he recibido tanto de tanta gente en mi tierra que lo menos que puedo hacer es devolver cosas. ¿Cuáles?: desde proyectos sociales, como bancos de alimentos, Cruz Roja o Cáritas, a ayudar a pequeñas organizaciones con proyectos con gran estructura unos y otros sin ninguna...

¿Proyectos como cuáles?

De enfermedades raras, uno...

¿Asesorando o con ayudas...?

Estas entidades necesitan ayudas pero, para optar a ellas, de administraciones o empresas, hay que hacer un estudio y un buen proyecto. El otro día nos encontramos con una madre con un problema grave, pero sin ningún medio y creo que ahí puedo aportar cosas...

¿De forma individual?

Sí, aunque Caixa ha desarrollado con sus empleados, familiares y amigos de trabajadores un grupo de voluntarios para llegar a esas organizaciones pues, por separado, yo no sabría cómo contactar.

¿Su balance como director?

No puede ser más que positivo al ser 17 años, aunque eso no quita que haya momentos difíciles...

La fusión con CajaCanarias...

Como reto, desafío y momento apasionante profesionalmente, sí. Gracias a Dios, la operación fue posible por hacerse con un equipo de profesionales extraordinario.

¿Hubo momentos dolorosos...?

Sí, emocionalmente tremendos: lo relacionado con personas tiene un valor infinitamente mayor. Detrás de cada una hay una familia y eso genera mucho dolor.

Pero, ¿se pudo hacer de otra forma o se hizo lo mejor posible?

Se hizo lo mejor que se pudo, se pusieron todas las medidas para preservar el empleo y no se despidió, aunque se tuvo que hacer traslados forzosos o permisos pactados. Estoy orgulloso de lo hecho. Quizás no dimos solución ideal a todos, pero hubo voluntad.

¿Fue, por tanto, ejemplar?

Sí, y a las pruebas me remito: la integración es total y los ERE fueron voluntarios para el que quisiera otro desarrollo profesional. Una integración siempre genera molestias, cambiar de interlocutor no gusta a personas y empresas, y se tomaron medidas para una mayor automatización, más tecnología y eficiencia, pero, ahora, ya no hay colas en las oficinas.

Bueno, alguna puntual sí hay...

Por supuesto, pero no te topas con 40 sillas ocupadas esperando para ser atendidas y coger número. Hay otro modelo de gestión, mucho más moderno y eficaz.

¿La aceptación social ha sido la que se esperaba? ¿Temieron lo peor cuando se iba gente a Caja 7?

Hoy tenemos más cuota de mercado que cuando me incorporé. Con una integración, siempre hay cierto rechazo y estaba descontado, pero, pasados 3 años, tenemos más clientes, más negocio, más nóminas, más pensiones, más confianza... Casi un millón de personas en Canarias confían en nosotros, el banco mayor de las Islas...

¿Es equilibrada la cuota de mercado de bancos en Canarias?

Hay un líder claro en la provincia de Tenerife en clientes, oficinas y negocio, que es Caixabank, y, en la de Las Palmas, ocupamos la segunda posición tras Bankia...

¿Es un panorama más lógico y razonable que hace 5 o 10 años?

Antes había un gran número de marcas y hoy se ha reducido por la crisis, que seleccionó mucho...

Depuración...

Sí, se han creado bancos sólidos con servicios de primera magnitud. Que en una provincia haya más marcas que otra es indiferente, lo importante es que haya oficinas, cajeros y empleados suficientes para dar un servicio de calidad.

Habla de la crisis y se dice que ya salimos: ¿lo cree? ¿Y en las Islas?

No creo que hayamos salido. Mientras exista un parado en Canarias, no se puede decir eso...

Pues entonces está fastidiado...

Una cosa es ver la luz...

¿Usted la ve?

Sí, y hay factores como el consumo o el PIB, mayor optimismo en la población, la gente ya pide préstamos para comprarse coches...

Pedir es una cosa, pero ¿se dan como se debe, se ha abierto de verdad el grifo? Fepeco dice que sí.

Ese es un buen testigo y su presidente lo sabe porque hemos estado hablando de la voluntad real que tiene Caixa de acompañar a los promotores en el desarrollo real de los tejidos principales canarios...

¿Básicamente con reformas y no con obra nueva, o también?

Financiamos reformas y obra nueva, aunque es verdad que hay un parque de viviendas sin terminar y el sentido común te dice que hay que acabar esto primero, pero Canarias tiene una oportunidad enorme para desarrollar la construcción no solo en el sector hotelero, sino en reformas de muchos edificios, como este (el central de La Caixa), que lo tenemos en reformas por seguridad y normas. Hay un campo enorme y queremos financiarlo...

¿Y qué obra nueva financian?

Estamos en todas las islas: edificación de naves, por ejemplo...

¿También vivienda?

Sí...

Lo digo por si tienen muchas por vender: ¿lo tienen calculado?

El número varía mucho, pues son daciones en pago de promotores que te entregan para cancelar el préstamo. Hay que comercializarlas cuanto antes: unas terminándolas, como la promoción de gran éxito de Los Acantilados, o vendiéndolas en estructura...

¿Les parece bien los fondos buitres? ¿No hay otros recursos?

Lo de buitre no me gusta...

Se les llama así...

Sí, pero diría que hay empresas locales, nacionales y multinacionales, unas bajo el paragua de fondos y otra bajo el de un SL, que buscan oportunidades y, si quieren comprarnos cierto inmueble sin terminar o comercializar y el precio es adecuado, por qué no...

Pero se liga con los desahucios y se plantea por qué no rebajar las cuotas para que se mantengan con dueños de aquí: ¿demagogia o no?

No lo mezclaría. Los desahucios llevan otra línea. Caixabank no ha hecho ninguno. Al revés, hemos propiciado viviendas a personas desahuciadas por otras entidades pero, para eso, esa casa debe estar acabada y habitable, y no todas estaban así: el parque es enorme, y que se vendan unas no quita que tengas otras para alquiler social...

¿Puede precisar cuándo tuvieron más dación y qué cantidad?

Hubo más en los años 13 y 14; muchos planes de reestructuración llegaban al final, muchas familias no podían asumirlos y llegábamos a esos acuerdos para que siguieran en sus casas y entorno, algo sagrado. Así, les quitábamos la carga hipotecaria, pero seguían con alquileres muy bajos: los tenemos desde 50 euros.

Giremos: ¿es optimista sobre la economía en Canarias para 2016?

Hay que verla con moderado optimismo. El principal sector, el turismo, va muy bien y existen perspectivas de que siga así, pues nuestro entorno competitivo, por desgracia, continúa con problemas y aquí gozamos de lo que se quiere: tranquilidad, sanidad, clima...

¿Y le parece razonable que eso no se traduzca del todo en empleo?

La continuidad de la cuota de turistas hará que el empleo crezca, al ser ya 4 años. Todas las empresas han tenido que reestructurarse y también las turísticas, pero las expectativas y maduración de la tendencia debe crear más empleo...

¿Le choca que hasta ahora no haya sido así; las cifras han sido de récord y, en algún caso, se ha reducido empleo o precarizado?

La empresa turística ha sobrevivido como otras. Han hecho reestructuraciones muy duras y muchas venían de reformas en sus hoteles, con cargas financieras muy grandes. Estos años han servido para normalizar su situación y abordar el futuro. No sería lógico que se mantuviera la tendencia positiva y no se generara empleo, pero tampoco hay que demonizar que no se pudiese crear. No es que haga un canto al empresario turístico, que sí, sino que lo contextualizo. Lo importante es haber llegado a la orilla, pues estábamos en una tormenta. Ahora toca mejorar la calidad y eso va ligado siempre al aumento de personal especializado.

Pese a los récords, caben 5 millones más de turistas sin construir más: ¿que seamos líderes mundiales y tengamos un 28% de paro lo achaca a la formación?

Las generaciones actuales están infinitamente mejor formadas: mis hijos lo están más que yo a su edad, aunque es verdad que Canarias tiene que buscar, como lo hace la banca y cualquier empresa de distribución, especialización. No podemos seguir pensando en eso de que "valgo para todo": para hacer una cama, llevar un café o ponerme en una cocina. El futuro pasa por concienciarnos de que la especialización es necesaria, de que la formación es fundamental y que los idiomas deben formar parte...

Chirría nuestra escasa formación en idiomas, y el propio sector lo censuró hasta hace poco...

Bien, pero el tiempo pasa muy deprisa. Hace 50 años, empezaron a venir los turistas a Canarias y hemos ido aprendiendo todo...

Sí, somos pioneros, el Puerto lo fue en Europa y por eso choca que no nos especializáramos antes...

Todos nos hemos ido concienciando del cambio. Hay planes formativos con grados de especialización; las escuelas de idiomas son claves, pues debemos pensar solo en la universidad... Necesitamos especialistas en la planta hotelera y extrahotelera y dar un servicio de calidad. Es lo que hicimos en banca, al pasar de una generalista a una de especialización. Cada vez, el cliente es más exigente y demanda que sepamos lo que necesita, y esto ocurre también en un restaurante o casa rural.

Cuando se alude a lo de diversificar la economía, ¿se lo cree? ¿Se apuesta en serio o es palabrería?

Es cierto que una de las grandes debilidades ha sido el abandono del sector primario canario.

¿Y lo achaca a...?

Son modas y, cuando en un hotel, alquiler de coches o en algo del turismo, alguien logra 3 veces lo que ganaba en la agricultura, es normal que mire para otro lado.

Salvo que las administraciones hubieran impulsado lo contrario...

No debemos echar la culpa a la administración. La culpa es de todos, y los aciertos, también. Canarias no puede darle la espalda a la agricultura; ningún país puede hacerlo, y en esta crisis esto ha sacado de una situación precaria a muchísimas familias. Es verdad que tenemos un campo muy concentrado en 2 o 3 cultivos y debemos reinventarnos con otros complementarios o alternativos, como el pepino o plantas. Aquí sí puede ayudar la administración, aparte de que la agricultura debería tener más protagonismo en la formación. Tenemos que apoyar la industria, siendo conscientes de que estamos justo en frente de Marruecos: debemos ver qué tipo de industria podemos desarrollar que sea competitiva en el mundo...

¿Dónde pondría usted el foco?

En las nuevas tecnologías.

¿No en energías limpias?

Por supuesto que sí, en toda su amplia gama pero sin que esto esté reñido con las energías tradicionales. Tenemos que buscar el mejor desarrollo dentro de una sostenibilidad, que no está reñida con que convivan diferentes energías.

¿Cómo vio lo del petróleo y cómo ve el debate actual sobre el gas?

No entiendo de gas ni petróleo...

Pero sí de economía...

Debemos ser conscientes de que los aviones necesitan combustible y que, si Canarias los pierde, tendría un gravísimo problema porque no vendría ni un turista. Apoyo la energía limpia pero sin demonizar un recurso como el petróleo que, mientras sea necesario, habrá que pensar en él. Si unas prospecciones y extracciones propician empleo, siempre que se garantice la seguridad, me parece bien...

¿Y el gas?

Es una alternativa, más limpio que el petróleo y algo más contaminante que las limpias...

O sea, lo cree necesario como transición, aunque algunos dicen que viene para quedarse mucho...

Deberían contestarlo los especialistas. Sí pido que Canarias tenga el abastecimiento garantizado asegurando la sostenibilidad del medio y huyendo, en lo posible, de todo lo que sea contaminación.

¿Y lo de plataforma tricontinental: aprovechamos bien África?

Es un término más recurrente que efectivo, pero tiene mucho de verdad. Hay que ponerlo en valor y saberlo desarrollar. Las infraestructuras aeroportuarias tienen una posición ideal, a lo que hay que añadir que tenemos una sanidad de primer orden mundial...

Bueno, estamos últimos según la encuesta de usuarios...

Habremos quedado los últimos, pero la española es de primer orden. He tenido la desgracia de vivirla y es así: ¿que puede mejorar? Por supuesto, pero es falaz decir que es mala. ¿Hemos de acabar con las listas de espera? Claro, pero compárate con la sanidad de países como EEUU: prefiero siempre ser un enfermo en España.

¿Entiende el malestar con los bancos? ¿Han reaccionado bien?

La banca pasa por un momento de desprestigio, pero se ha puesto a todos por igual, cuando hubo bancos que han recibido ayuda pública y otros no, pero no se sabe quiénes. Unos llevaron una política más social y otros menos, pero tampoco se distingue: el tiempo pondrá todo en su sitio. Caixa ha tenido una hoja de ruta muy clara y se ha implicado en lo social.

¿La burbuja fue mayor aquí?

La crisis empezó en Canarias...

Bueno, en EEUU...

Sí, pero en agosto de 2007 no se vivía la crisis y aquí ya veíamos alertas. Lo de comprar una casa es parte de la cultura del español...

¿Qué se pudo hacer y no se hizo?

Esto fue un tsunami imparable y mundial que nos cogió con el paso cambiado: ¿quién iba a decir que las hipotecas subprime caerían?

¿A qué achaca que se construyera aquí el triple?

Porque el alemán no quiere comprar, sino vivir de alquiler: es la cultura mediterránea...

Pero eso no lo hizo Italia...

En Italia hay un gran número de personas que, si pueden, compran. No se construyó tanto al no haber tanto acceso a crédito, pero había empleo, recuperación... Aquí, el español tiene esa ilusión de comprar y dejarle algo a los hijos.

Elogia al anterior consejero regional de Economía

Prudente al máximo al referirse a gobiernos y gestiones de partidos, Orozco sí pide que se deje trabajar y cree que, de momento, Clavijo lo está haciendo bien. "Hay que pedir cuentas al final, como pasa con cualquier directivo de empresa o con un párroco de una iglesia, pero el pueblo es soberano al elegir", señala. Además, y en esta línea, asegura que ha habido muy buenos presidentes en las Islas y resalta la labor "brillante" del último consejero de Hacienda, "que tuvo un papel muy difícil, pero consiguió que Canarias terminase con muy buena nota el ejercicio". Eso sí, no entiende que no se premie luego a las comunidades que cumplen.

Fundación Cajacanarias y presencia de La Caixa en las Islas

Sobre la Fundación CajaCanarias, subraya que ahora hay dos "que funcionan de forma muy potente; lo importante es sumar. Competir y confrontarlas sería un error". Asimismo, remarca que La Caixa cuenta con la mayor red de oficinas y cajeros (540) en las Islas, "el doble que tenía CajaCanarias y con la segunda entidad con unos 200 y pico. Los hemos puesto donde más necesidad había; por algunos cajeros nos cobraban y no eran tan necesarios, al no pasar gente. Ahora, tenemos oficinas en el 100% de los municipios de Tenerife y, en Las Palmas, en el 98%. Además, abrimos centros de especialización y tenemos nuevas líneas para agricultores y no residentes".