Las cifras de fallecidos en las carreteras volvieron a subir a nivel nacional el pasado año. Sin embargo, en la provincia de Santa Cruz de Tenerife durante 2016 se ha producido un descenso considerable, que ronda el 50 por ciento, en las vías competencia de la Guardia Civil de Tráfico. En los últimos doce meses hubo 14 víctimas mortales en las islas occidentales, frente a las 27 registradas en el 2015.

Así lo manifestó el jefe provincial de Tráfico, Eduardo Polo, quien matiza que, más allá de las cifras, hubo 14 sucesos trágicos.

En estas estadísticas no figuran los fallecimientos registrados en calles o vías donde las competencias corresponden a policías locales.

En este balance figuran aquellas personas que perdieron la vida en el acto o en las 24 horas siguientes al accidente.

Del conjunto de fallecidos durante 2016, la inmensa mayoría, once concretamente, corresponden a personas vulnerables, es decir, motoristas, peatones y ciclistas.

Eduardo Polo indica que en el último ejercicio perecieron en carreteras de la provincia seis motoristas, tres peatones y dos ciclistas. Y a estos se añaden dos personas que circulaban en coches y una más en una furgoneta.

Polo recuerda que, según los estudios a nivel nacional, las cuatro principales causas de accidentes mortales son la distracción (principalmente por el uso del móvil y el envío de mensajes instantáneos); la velocidad excesiva e inadecuada; no respetar la prioridad de paso (stop, ceda el paso o semáforos en rojo), así como el consumo de alcohol y drogas.

En los informes realizados a nivel estatal, el 40 por ciento de las víctimas mortales en accidentes de tráfico habían consumido bebidas alcohólicas o estupefacientes.

El jefe provincial de Tráfico reconoce que, pese a la reducción significativa en el número de muertes, la cifra de accidentes y el volumen de heridos graves y leves se ha incrementado en las islas occidentales.

Polo señala que una parte de ese aumento está relacionado con el factor de mayor rigurosidad en la estadística aplicada desde 2016, gracias a que casi la totalidad de los ayuntamientos, a través de las policías locales, han aportado cifras de siniestralidad. Esta información más extensa, según el responsable de Tráfico en Santa Cruz de Tenerife, "nos permite trabajar mejor" a la hora de intentar adoptar medidas preventivas.

Eduardo Polo recuerda que, actualmente, Tráfico prefiere trabajar con el parámetro del Invive (Intensificación de la Vigilancia de la Velocidad), donde se estudian los excesos sobre la velocidad permitida, la cifra de heridos graves y leves, la concentración de accidentes y la intensidad del tráfico.

Explica que no es lo mismo que en un mes haya 5 accidentes en una vía por la que pasan 100.000 vehículos al día que la misma cifra en una por donde circulan 1.000.

Según Polo, el podio de los tramos Invive en Tenerife está ocupado por la entrada a Santa Cruz por la Refinería (TF-4); el enlace entre la autopista del Norte y la del Sur (TF-29) por delante del cementerio de Santa Lastenia, y la carretera general del Sur (TF-28) en toda su extensión.

El problema en la TF-4 es que los conductores no respetan el límite de velocidad y solo frenan al acercarse al recinto ferial. En la TF-29 no se respeta un ceda al paso situado en la rotonda de entrada a Mercatenerife. Y en la TF-28 hay un grave problema de exceso de velocidad en varios tramos, así como en las travesías de las zonas urbanas.

Tramos de concentración de accidentes habituales

Los puntos de concentración de accidentes (tramos de 100 metros con tres o más accidentes al año) se mantienen en los últimos años. En la autopista del Norte, entre Santa Cruz y La Laguna, hay varios, como a la altura de Somosierra, la curva de Taco, el Hospital Universitario o Padre Anchieta. Otros tramos similares son la zona de Guamasa, la salida de la Vía de Ronda o la propia Vía de Ronda. En la autopista del Sur, los tramos de accidentes frecuentes están en la conexión con la entrada a Santa Cruz por la Refinería (TF-4), la curva de Las Caletillas (sentido a Santa Cruz), así como los 15 kilómetros existentes entre el Aeropuerto Tenerife Sur, Las Chafiras y Guaza (Arona).

Un 75% menos en la curva de El Sauzal

El jefe provincial de Tráfico de Santa Cruz de Tenerife señala que, en los últimos seis meses, se ha registrado un 75 por ciento menos de accidentes en el tramo de la autopista del Norte conocido como la Curva de El Sauzal. Eduardo Polo atribuye esta circunstancia al radar colocado en dicho punto en los carriles que discurren hacia La Orotava.

Las carreteras convencionales

En cuanto a las carreteras convencionales donde existen más controles de velocidad por parte de la Guardia Civil de Tráfico por su elevada tasa de accidentes, varias de ellas están en el Sur de la Isla y otras en el Norte. Una de ellas es la que discurre entre Valle San Lorenzo, Guaza y Las Galletas (TF-66). Otra vía que merece atención por Tráfico es la que enlaza el casco de San Miguel de Abona con Los Abrigos y El Médano (TF-65). En la zona metropolitana figura la Vía de Ronda (TF-13). Por el Norte, se halla la vía TF-152 (entre Tacoronte y El Sauzal), así como la prolongación de la TF-5, entre Icod y Garachico. Si en las autopistas predominan las sanciones con radares fijos, en las vías convencionales las infracciones se detectan con radares móviles.

Culpa del conductor en el 80% de los accidentes

El responsable de Tráfico en Santa Cruz de Tenerife recuerda que, según los estudios, en el 80 por ciento de los accidentes graves la responsabilidad corresponde al conductor, mientras que el 20 por ciento restante se reparte entre el estado o trazado de las carreteras y el vehículo. En cualquier caso, cuando los agentes de la Guardia Civil de Tráfico, los investigadores de vía de la Jefatura o un particular detectan una anomalía en una determinada vía, esta se analiza y, si se verifica el problema, se elabora un informe que se remite al Cabildo.