A diferencia de CC, que en su reunión del pasado sábado del consejo nacional sí puso líneas rojas sobre qué áreas está dispuesta a ceder al PP y cuáles no de darse un cogobierno, los populares asisten a la primera reunión formal de la negociación de ese posible pacto, prevista para mañana, con otras prioridades. Según fuentes del grupo popular, en ningún momento se han planteado internamente qué consejerías reclamarán. Antes de llegar a ese punto, consideran mucho más relevante saber si hay opciones de pactar un programa de gobierno, aunque son conscientes de que ambos partidos deberán ceder partes de sus pretensiones iniciales.

En este sentido, el PP cree fundamental que cambie por completo la política de empleo en Canarias ante lo que considera un evidente fracaso del Servicio Canario de Empleo (SCE) desde hace años. Los populares no se plantean eliminar esta entidad, pero sí modificar a fondo su funcionamiento, objetivos y organización, de manera que cambien las opciones reales de integración laboral de los parados con una relación mucho más efectiva con las empresas.

Otra reforma clave es la fiscal. Los conservadores no se conforman solo con bajar el Impuesto General Indirecto Canario (IGIC) del 7 al 5%, al entender que los motivos que llevaron a Paulino Rivero a subirlo en 2012 por los efectos de la crisis ya no solo se han disipado, sino que se lleva varios años con datos récord de recaudación que prueban que hay mucho margen para esa reducción y para que las empresas dispongan de más liquidez para invertir y dinamizar la economía.

No obstante, tampoco les basta con el Igic y miran también al tramo autonómico del IRPF, con lo que, en realidad, buscan una reforma fiscal amplia. Lo que queda por saber es si CC está dispuesta a profundizar tanto en el actual sistema impositivo y recaudatorio, por mucho que la consejera de Hacienda, Rosa Dávila, lleve dos años indicando que, en 2018, era ya factible una rebaja fiscal.

Además, la reforma electoral también será relevante para un acuerdo. Tras pactarse el martes bajar los topes del 6 al 5% regional (por exigencia expresa y reiterada del PP, que se plantó en ese porcentaje y hasta propuso mantener el actual) y del 30 al 15% insular, la clave radica ahora en cómo se mejora la proporcionalidad y la relación entre población y territorio. Frente a CC y PSOE, los conservadores se muestran tajantes y rechazan la lista regional (que nunca han visto con buenos ojos, aunque tampoco sin líneas rojas hasta ahora). Abogan más por ampliar el numero de escaños de Tenerife y Gran Canaria, pero éste puede ser un punto conflictivo.

En la negociación, asimismo, se analizará si a CC y PP les conviene, en caso de alcanzar un acuerdo, que ASG les apoye desde fuera del gobierno o si es mejor dar más estabilidad con su participación en el Ejecutivo. Hasta ahora, Casimiro Curbelo ha insistido en que prefiere hacerlo desde fuera, pero los posibles socios no tienen muy claro cuál es la mejor alternativa.

En contraste con estas prioridades del PP, a las que se suman su visión de la educación, las medidas urgentes en sanidad y emergencia social o algunas en Economía, los nacionalistas consideran intransferibles áreas como las de Hacienda, Servicios Sociales, Agricultura y Pesca, Presidencia y Justicia, así como Cultura. Por el contrario, son más flexibles con Obras y Carreteras, Economía, Política Territorial y Turismo, aparte de la vicepresidencia.

Compuestos los equipos negociadores de CC y PP

Tanto CC-PNC como PP ya han decidido las personas que llevarán la negociación que se abrirá desde mañana en el Parlamento regional para intentar alcanzar un acuerdo para un cogobierno o pactos puntuales que den estabilidad a lo que queda de legislatura en la Islas, si bien esta segunda opción es más remota, al menos en la perspectiva del PP. En el caso de los nacionalistas, el equipo negociador lo encabezará el secretario general de CC y consejero de Presidencia y Justicia, José Miguel Barragán. También lo integrará la secretaria de Organización, Guadalupe González Taño, el portavoz en el Parlamento de Canarias, José Miguel Ruano, y los tres vicesecretarios generales de la formación: Beatriz Calzada, David de la Hoz Fernández y Rosa Dávila, que ejerce de consejera de Hacienda, una de las áreas que CC no pretende ceder. Por parte del PP, los negociadores serán Australia Navarro, Lope Afonso, Gabriel Mato, Manuel Domínguez, Jorge Rodríguez y Luz Reverón. Las negociaciones comenzaran mañana, a las 10:30 horas, si bien Clavijo y Antona ya se reunieron el lunes.