El Instituto Tecnológico de Canarias (ITC) y la "startup" canaria Brinergy Tech S.L. colaborarán en el desarrollo de la primera depuradora a escala comercial que utilizará el proceso de la ósmosis natural en combinación con una rediseñada tecnología de desalación denominada desionización capacitiva, con el objetivo de alcanzar un modelo de tratamiento de las aguas residuales energéticamente más eficiente y de alto rendimiento.

El desarrollo del prototipo para su aplicación industrial, basado en tecnología generada por Brinergy y que cuenta con patente internacional, se realizará en las instalaciones del ITC en Pozo Izquierdo, Gran Canaria, y contará con el asesoramiento especializado del centro tecnológico de I+D+i canario -dependiente de la Consejería de Economía del Gobierno regional- para la monitorización de la planta piloto de depuración y su evaluación técnica.

El centro colaborará con una empresa isleña para crear la primera depuradora con este sistema

La infraestructura será probada de forma conjunta, con la idea de optimizar la eficiencia y viabilidad comercial de este nuevo sistema de tratamiento de aguas no potables mediante tecnología desarrollada y patentada en las Islas, indica el Ejecutivo autonómico a través de un comunicado.

El proyecto contará con la colaboración del Laboratorio de Microfluidos de la Universidad de Stanford que, destaca el Gobierno, es "puntera" en la investigación aplicada a las tecnologías del agua y actualmente figura como la segunda mejor posicionada a nivel mundial -según el ranquin de Shanghái- y ha sido cuna de empresas como Hewlett-Packard, Cisco Systems, Yahoo! o Google.