El diagnóstico está claro; las soluciones, no tanto. Todos los grupos de la oposición y el Ejecutivo coincidieron ayer -durante el pleno monográfico para abordar la situación de pobreza que vive el Archipiélago- en que la precariedad es un problema estructural producto de un modelo económico basado en el sector servicios, pero la receta "oficial"para mejorar los indicadores sociales es diversa y no pasa, como sugirió Nueva Canarias (NC) o han demandado los sindicatos en la mesa de concertación social, por implantar una renta mínima garantizada.

"Es algo que no compartimos porque no resuelve el problema de la pobreza, aunque atenúa los síntomas. De lo que sí podríamos hablar es del incremento de la prestación canaria de inserción (PCI), de trabajar para que sirva para acabar con la cronificación de la pobreza", planteó el presidente del Gobierno, Fernando Clavijo, en su última intervención. En la tribuna de espectadores lo escuchaba, atento, el Comisionado de Inclusión Social y Lucha contra la Pobreza, Santiago Rodríguez, que calcula que antes de que acabe el año Canarias contará con una estrategia consensuada para abordar la exclusión social, una demanda también unánime. "Me alegra que todos los grupos reconozcan que la situación requiere una actuación de urgencia y que nadie niegue los datos".

Clavijo, tras escuchar los reproches de todos los diputados y agradecer el tono de la mayoría, reconoció que el Gobierno "puede hacerlo mejor". Defendió, no obstante, que el escenario es hoy más favorable que hace dos años y medio, cuando llegó al cargo, a pesar de los recortes del Estado y de que Canarias haya sido "la comunidad peor financiada".

Sus argumentos no convencieron a la oposición, especialmente a los grupos popular, socialista y Podemos, que pidieron medidas urgentes y volvieron a lamentar que el Fondo de Desarrollo de Canarias (Fdcan) no tuviera un cariz más social. "Tiene que transformar el crecimiento económico en mejoras en la vida de la gente. Le pagamos el sueldo para que busque soluciones", le recriminó Josefa Luzardo (PP) después de denunciar que haya nombrado un "comisionado florero".

Por su parte, Noemí Santana (Podemos) lo acusó de tratar la pobreza no solo como un problema crónico, sino como una catástrofe natural. Román Rodríguez (NC) aprovechó su turno para recuperar propuestas como la recuperación del impuesto de sucesiones o una tasa turística.

Por su parte, la portavoz del grupo socialista, Dolores Corujo, propuso implementar un sistema de prestaciones que permita apoyar económicamente a las personas que no tengan cubiertas sus necesidades básicas, equiparar las pensiones no contributivas a la PCI y ampliar esas prestaciones para acercarlas al salario mínimo interprofesional.

Elena Luis (CC-PNC) defendió que medidas como la Ley del Suelo o la de las Islas Verdes servirán para cambiar la tendencia y disminuir la precariedad. Respondía así a Casimiro Curbelo, que habló de de las dificultades de empleo añadidas que tienen las personas que viven en islas como La Gomera, que se ven obligadas a irse a las islas capitalinas en busca de trabajos precarios.

La atípica jornada, que concluyó sin propuestas de resolución que someter a votación, se pareció más a un debate sobre la precariedad en Canarias que a un pleno.

Solo un plan contra la pobreza, en 1998

Canarias solo ha tenido un plan de lucha contra la pobreza. Se aprobó en 1998, caducó hace diez años y nunca se evaluó. Después solo se han articulado medidas de choque, pero no una estrategia global. "Formar ahora un equipo que sea capaz de evaluar lo que no se evaluó entonces es muy difícil. Tenemos que lograr un plan consensuado. Porque ¿de qué sirve un plan si luego un cabildo no lo considera apropiado?", adviertió ayer Santiago Rodríguez. El Comisionado ha propuesto en la mesa de concertación social la posibilidad de reformar la PCI y atender a más personas. "Un plan de copia y pega se hace en 15 días, pero tenemos que analizar las necesidades reales de cada sector". Clavijo anunció que este segundo plan contra la pobreza, dotado con 15 millones de euros, es "insuficiente", y la partida se incrementará a lo largo de 2018.