La lucha canaria y el salto del pastor serán declarados Bienes de Interés Cultural (BIC) después de que sus candidaturas hayan recibido el preceptivo informe favorable del Consejo del Patrimonio Histórico de Canarias, según ha anunciado hoy el Gobierno autonómico.

El Consejo de Patrimonio ha dado también su visto bueno a que se catalogue como de interés cultural la escultura "El Atlante", obra del escultor Tony Gallardo.

En una reunión presidida por el viceconsejero de Cultura, Aurelio González, y el director general del área, Miguel Ángel Clavijo, el Consejo ha destacado su respaldo a los expedientes referentes a la lucha canaria y el salto del pastor, aspirantes a ser declarados como BIC en el apartado de Conocimientos y Actividades Tradicionales, se detalla en la nota.

Ya que, en lo referente al salto del pastor, se trata de una práctica que "cumple con la premisa de tener unos notorios valores, tanto históricos como etnográficos, cuyo testimonio y expresión pueden rastrearse desde las poblaciones prehispánicas del archipiélago hasta la actualidad".

Documentación escrita, tradición oral e incluso algunas evidencias arqueológicas avalan su trascendencia y arraigo en las islas, "así como de su indisociable vinculación a diversas actividades sociales y económicas que hoy forman parte de nuestro patrimonio cultural", añade.

Respecto a la lucha canaria, expone que, si bien "existen diversas teorías sobre su origen", lo cierto es que "todas hablan de una procedencia prehispánica, pudiéndose acudir a las crónicas de la Conquista" para verificar esa circunstancia.

Y matiza que, aunque "es muy aventurado establecer una relación lineal entre la lucha aborigen y su producto actual, la lucha canaria, siendo más lógico aceptar que la actual haya sido fruto de una larga evolución y de un encuentro cultural", es un valor que "no tiene interrupciones en la historia" del archipiélago.

En cuanto al monumento "El Atlante", datado en 1986 y situado en la salida norte de Las Palmas de Gran Canaria a orillas del mar, se valora que "reivindica la geografía y la historia del lugar donde su ubica la escultura", al estar elaborado con fragmentos de lava.

Dotada de "notables valores de tipo artístico, cultural, sociológico y etnológico" que se suman a la propia importancia de su creador, "un escultor e intelectual de amplia y reconocida trayectoria en la historia del arte" de las islas, la obra "es un testimonio singular de la cultura canaria", sentencia el Consejo del Patrimonio Histórico.